Diego el dueño de mis fantasías (1) - Relatos Eróticos

Diego el dueño de mis fantasías (1)

... tres dildos para mí colección.
Llegando a mi casa le dije a Diego que me ayudara con las bolsas. Lo cual lo hizo de mala gana y no le tomé mayor importancia.
Acomode las compras y me metí a bañar, una vez que acabe le grité a Diego que si me podía pasar la toalla que había dejado en mi cama, después de unos minutos abrió la puerta y me vio ahí en pelotas completamente desnudo y con mi super erección la cual se quedó embobado un par de minutos observadola, en cuanto reaccióno solo me aventó la toalla y azotó la puerta del baño.
A lo cual yo tomé la toalla me seque perfectamente y salí en pelotas del baño, a lo cual Diego se hacía el que no miraba y seguía en su videojuego, pero notaba como cada cierto tiempo volteaba su cabeza para ver mi erección.
Después de quedarme un par de minutos me fui a cambiar y regresé con Diego a la sala. Y le pregunté que si le gustaba, el solo respondío si con la cabeza pero no salía ni una palabra de su boca a lo cual le dije que si ya había visto una, en ese momento Diego se me quedó viendo y empezaron a salir lágrimas y me dijo que si, pero que su mamá le había dicho que eso era malo y que jamás debía de volver a ver eso ya que su mamá se dió cuenta de que espiaba a su tío cuando se bañaba.
En ese momento le dije a Diego que eso no era malo que de hecho era muy rico y que era lo mejor de nosotros los adultos.
Así que apague el vídeojuego, cerré todas las puertas y ventanas de mi casa y le dije, vamos a mi cuarto te voy a enseñar lo ...

... divertido que es.
En eso Diego toma mi mano, entra al cuarto y se sienta en la cama y le pido que cierre sus ojos. En lo que el estaba así me quite toda mi ropa y solo me que en calcetas y mi playera de tirantes a lo cual al abrir los ojos Diego me vio de nuevo casi desnudo, le dije ven tocarla no hace nada ves, sobándome yo con mi propia mano.
El con un poco de miedo lo hizo pero al final ya estaba jugando con mi verga con sus dos manos, para ese momento yo, ya tenía ganas de ensartalo brutalmente como me encanta, pero sabía que está oportunidad jamás hiba a pasar de nuevo así que me tranquilice un poco y justo en ese momento siento algo caliente, era los labios Diego que se encontraba ya casi tragando mi verga, en ese momento no lo pose más y dije este putito este día floreado va a quedar, en ese momento pare a Diego, fui a la cosina por lo que compre en la sexshop que lo hice pasar por otra bolsa más para que jamás sospechará, me fui corriendo con esa bolsa a mi cuarto, volví a cerrar y puse el seguro.
Y le ordené a Diego que me la siguiente lamiendo, poco a poco el muy putito empezó a tragar mi verga hasta que no podía más, lo agarre del pecho y lo lancé a la cama, dónde empezé a desnudarlo, besarlo y mordiendo. Sabía que al putito le gustaba porque solo lo escuchaba gemir, en eso y sin que se diera cuenta le puse las esposas y lo asegure a mi cama, sabía que hiba a gritar así que le quite su trusita de caricaturas, se la puse en la boca para que no pudiera gritar y levante ...