1. En su casamiento


    Fecha: 20/06/2020, Categorías: Infidelidad Tus Relatos Autor: Mad, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Hoy era el gran día de unos conocidos míos, Mónica y Cesar, una pareja liberal con la que había quedado bastantes veces para tener intercambios.
    
    Se la describiré, ella es de piel blanca, ojos claros, tetas pequeñas pero ricas, un abdomen formado, unas tremendas piernas y un trasero majestuoso, redondo y grande, que lucía espectacular en sus pantalones entallados o calzas.
    
    Me contrataron para hacer las fotos de su boda, estaba en el recinto donde se iba a celebrar la boda, tras preparar algunas cosas me fui al cuarto del novio a charlar con él y hacerle unas fotos.
    
    Me comento que Mónica estaba nerviosísima con todo lo de la boda y que su madre tampoco ayudaba mucho, le dije que no se preocupara que intentaría calmarla a lo que, entre risas, Cesar me contesto que seguro que era capaz de hacer que fuera bien relajada a la ceremonia.
    
    Tras unas fotos con sus familiares salí de allí para dirigirme al cuarto de Mónica, allí estaba la peluquera, la madre de Mónica y una tía suya.
    
    Mónica llevaba una batita blanca de seda y solo se la veía las medias transparentes que terminaban justo encima de sus rodillas con un sexy encaje.
    
    A Mónica se la notaba nerviosísima y su madre no paraba de decirla como tenía que ser todo, poniéndola más nerviosa aún, así que la pedí a la madre y la tía que salieran, que la novia necesitaba tranquilidad y era su momento de relax con la peluquera y las fotos.
    
    M: ¡Gracias, ya me estaba hartando!
    
    L. Si! ¡Me mando tu futuro marido a ...
    ... salvarte jajá!
    
    M: ¡Jajá, ternura!
    
    L: Bueno, ¡comenzare con las fotos!
    
    M: ¿Pero? ¡Aun no me pongo el vestido!
    
    L: No importa, ¡estas vienen en el paquete!
    
    En cuanto estas salieron comencé a hacer fotos a Mónica mientras la peinaba y maquillaba la peluquera.
    
    Cuando esta acabo y salió del cuarto levante a Mónica de la silla para seguir haciéndola fotos, ya se la notaba más tranquila.
    
    M: ¡Excelente fotógrafo, jajá!
    
    L: ¡Uhm!! ¡Mejor dicho, excelente modelo, que piernas!!
    
    M: Jajá, ¿qué lindo y ahora qué sigue?
    
    L: ¿Segura que quieres saber?
    
    M: ¡Claro, dime!
    
    Me acerqué y la di un buen beso mientras le desabrochaba la bata y se la abría.
    
    Llevaba un sujetador blanco redondo sin tirantes moldeando sus pequeños pechos y la parte delantera de su braga o tanga era blanca transparente con un encaje bien sexy.
    
    L: ¡Que rica te ves, uhm!!
    
    M: ¿Que haces?
    
    L: ¡Dándote tu regalo, jajá!
    
    M: ¿Dándome o dándote? ¡Jajá!
    
    Deje la cámara en el tocador y mis manos se posaron en su trasero disfrutando de él, me arrodille y la quite la tanga y comencé a lamer los labios de su coño mientras acariciaba sus muslos.
    
    Siempre me encantaron sus piernas, torneadas y bien carnosas, de un color hermoso y con sus medias se veían más apetecibles.
    
    Metí bien dentro de su coño mi lengua, comenzando a comérselo, mi lengua se movía rápido dentro de ella, una y otra vez, jugaba su clítoris, lo mordía, afuera se oían los ruidos de su madre, pero yo no me detendría nada, ...
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