Tino, mi perverso vecino, me rompe el culo en su casa 2.
Fecha: 22/06/2020,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: Danisampedro91, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... por el macho y ser así acopladas.
Una vez colocados de pie tumbados sobre la mesa como nos había ordenado, empezó aquella caliente y excitante cópula.
Primero le introdujo aquel enorme y sabroso rabo por el culo, al jovencito de mi vecino, haciéndolo chillar y gemir de placer, ¡ohhh! ¡ooohhh! ¡ooohhh ohhh!
Dios, mi polla había dado un respingo al escuchar como gritaba y gemía mi joven vecino. Ambos estábamos agarrados por las manos, entrelazando nuestros dedos, y noté como apretaba mi mano mientras una corriente eléctrica recorría mi espina dorsal. Relamía con mi lengua los labios, deseando sentir dentro mía aquella verga que se estaba follando a mi vecinito.
Después de darle unas ricas cogidas, el perverso y viejo de nuestro vecino, le sacó la polla, pasando a ensartarla en mi ardiente y caliente culito.
Me hizo abrir más de piernas, y colocando la punta de su verga sobre mi caliente agujerito, agarrado a mis caderas, dio una envestida de pelvis, enterrándome toda la polla en mi abierto y resbaladizo agujero.
¡Ohhh! ¡ooohhh! ¡ooohhh ohhh! Gemí a la vez que me estremecía, notando como mi culo se abría dando paso a aquella polla que volvía a profanar mi ardiente y caliente culito.
Dios, notaba pegar su pelvis contra los cachetes de mi culo y sus enormes pelotas golpear la entrada de mi ano, mientras se deslizaba por mis entrañas la verga de mi viejo y perverso vecino, rozando y golpeando mi próstata, haciendo al igual que había hecho ...
... anteriormente mi jovencito vecino, gritar gimoteando mientras mi cuerpo se estremecía retorciéndome de placer, a la vez que apretaba mi mano contra la de mi vecinito.
Sin poder aguantarnos, tanto mi vecinito como yo, mientras el cabrón del perverso de nuestro viejo vecino, copulaba conmigo, girando nuestras cabezas nos miramos a los ojos, empezando a comernos a besos mientras el hijo de puta de nuestro vecino, nos sodomizaba allí recostados sobre la mesa, como si fuéramos yeguas dispuestas para la copula.
Después de tenernos un buen rato allí dándonos por el culo a ambos, el perverso del viejo vecino, se corrió dentro del culo del jovencito de mi vecino, mientras soltaba unos fuertes gruñidos.
Ya, ya me corro, ya me corro, gritaba ensartando salvajemente la polla en lo más hondo de el joven culo de mi vecinito.
¡Ohhh! ¡ooohhh! ¡ooohhh! Gruñía el cabrón derramando su leche en las entrañas de mi vecinito.
El viejo mientras recuperaba el resuello, daba palmaditas a mi culo, diciéndonos lo bueno y ricos que estábamos.
¡Ay putitos, que follada más rica! Como me habéis hecho gozar. Hoy si que he disfrutado de 2 ricos y sabrosos culitos. Nos decía el muy cabrón, recuperando la respiración.
El muy cabrón había gozado como nunca con nuestros culitos, pero nosotros, todavía estábamos con la polla tiesa y a punto de reventar. La de mi jovencito vecino, se la veía enrojecida e hinchada, con la punta toda brillante. La mía, al igual que la suya, enrojecida ...