1. Manuela (12)


    Fecha: 11/12/2017, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Son las siete de la tarde del viernes en el que Charo y yo hemos quedado en León. Llevo más de tres días intentando acercarme desde Almería a dicha capital en medio de heladas, nevadas, trombas de agua, carreteras cortadas, trenes y aviones detenidos y frío, mucho frío. Gracias a un potente todoterreno que he alquilado en Benavente y a ciertas dosis de temeridad entro en este preciso instante al Hostal San Marcos. No dejan de mirarme con cara de sorpresa los empleados de la recepción ("hace dos días que nadie entra ni sale de la ciudad") mientras me adjudican una grandísima suite ("está casi vacío el hotel") y me entregan un e-mail llegado el día anterior antes de que se cortaran las líneas telefónicas con toda España.
    
    Antes de entregarme a una caliente y reparadora ducha leo el mensaje de Charo: << cariño, es evidente que el viernes no nos vamos a ver en León. Por aquí las carreteras están imposibles y al menos durante ocho o diez días las previsiones indican que no nos podremos mover. Como es habitual las líneas telefónicas se cortarán, por lo que probablemente no estaremos en contacto durante un tiempo. Te volveré a telefonear o a mandar un correo electrónico en cuanto pueda. De momento seguimos quedando en León. No te aburras, pero a ver qué haces. Estoy perfectamente (y tu hijo/a también) aunque te echo mucho de menos en todos los aspectos. Besos y algo más >>
    
    Algo más descansado e intentando no contrariarme en exceso ante la situación, bajo a cenar porque estoy ...
    ... verdaderamente necesitado. En el restaurante apenas hay cinco o seis mesas ocupadas y el atento maitre me sitúa junto a una ventana que presenta una visión siberiana más que leonesa. Un gratificante menú galaico-astur-castellano-leonés me devuelve a la vida y paso a la coqueta cafetería en donde, por lo que veo, nos refugiamos aquellos que estamos en León descolgados del resto del mundo. Entre las interferencias la televisión certifica que estamos en la peor borrasca invernal de los últimos cincuenta años y que va a durar al menos una semana más. Aquellas personas que estamos en la barra empezamos una conversación al hilo de lo meteorológico, probablemente buscando calor humano y compañía ante la sensación de pequeñez y desamparo que dejan siempre las jugadas de la naturaleza y , por supuesto, tratando de vencer el aburrimiento.
    
    Compartiendo unas copas pasamos a sentarnos en una mesa un grupo de personas entre las que están dos recién casados de poco más de veinte años de vuelta de su viaje de novios ("nos casamos hace tres semanas; vivimos en Santander"), dos amigas treintañeras en viaje de estudios ("somos maestras en un instituto de Palencia"), un simpático sesentón vendedor de ropa deportiva ("soy extremeño, vivo en Bilbao y es mi último viaje antes de jubilarme") y una señora de algo más de cuarenta años con el estilo y la imagen típica de la zona de Serrano de Madrid ("tengo un negocio de joyería en la calle Goya") acompañada de una sirvienta de su edad de rasgos ...
«1234...»