1. 5 – 129 1960: Noviembre


    Fecha: 10/08/2020, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: S. Jackson, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... cremallera ese pantalón cayó al piso, se deslizó el calzoncillo agitándose el pene, pasó el dedo índice que antes estaba en sus labios por ese glande de pene velludo venoso muy erecto, lo pasó por los labios y nariz del niño, “ahora… vamos, ven, acompáñame” como hipnotizado lo siguió, la ansiedad y el deseo de tener ese billete le hizo que Renzo Orestes  le deslice el short y la remerita dejando a un lado del rincón de la cama esa ropa junto con las sandalias puestas, de esa manera Renzo Orestes  le hizo lentamente acostarse en la cama humilde donde dormía, Ezequiel se dejó nomás manosear el penecito haciéndolo poner erecto se inclinó haciendo que se abra su boca lamiendo a cada vez ese penecito ya ensalivado, por sobre el cuerpo de Renzo Orestes se acostaba Ezequiel, la cara del niño lamía el pene de Renzo Orestes mientras que al mismo tiempo la cara de Renzo Orestes lamía el pene de Ezequiel, haciendo un deliciosos 69, así se chuparon los penes, él, Renzo Orestes, le había enseñado esa postura sexual que les agradaba, ya estaban tan ensalivados las pieles de esos penes que se deslizaban fácilmente en los labios de quienes chupaban esos penes, ahora ya separados Renzo Orestes puso encorvado a Ezequiel y ese pene ensalivado iba adentrándose poco a poco en ese potito “ahhh!!!, siente como te lo meto” jadeaba “eres mío, mío” el pene entró totalmente dentro de ese traserito de nueve años, “siente que ya está adentro…. todititito” las manos de Renzo Orestes  se posaban sobre la ...
    ... espalda del niño sobándolas con sutileza sin sacar el pene dentro de ese potito, “que lindo lo tienes, eres el mejor” se complacía Renzo Orestes  al sentir que su pene estaba dentro de ese traserito voluminoso, ahora las manos de Renzo Orestes  hacían masajes circulares a los glúteos del potito de Ezequiel y aún el pene estaba dentro, “¿te gusta así que te lo meta siempre?” el niño asentía ante la pregunta, lo hacía con un movimiento leve pues aunque Renzo Orestes  no miraba la carita de Ezequiel éste fruncía la cara, sentía algo de dolor, es que el pene de Renzo Orestes  era grueso, venosos y velludo de tal manera que los pelos de la pelvis rozaban los glúteos del niño, Renzo Orestes miraba ese suave movimiento, así en ese suave ritmo el pene entraba y salía, luego vinieron los suaves y sutiles mete y saca, las manos de Renzo Orestes  se posaban ahora en las caderas del niño, estaba al éxtasis de hacerle el sexo “¿poto o boca?... dime” el niño jadeando un poco decía “¡poto!, ¡poto!, ¡poto!” Renzo Orestes sonreía y continuaba con mayor movimiento ese acto sexual de penetración anal, sentía ese placer de coger, de sentir que dominaba la situación, que era el macho dominante en ese tierno niño de nueve años, lentamente fue eyaculando dentro de ese potito, “te estoy empreñando, te lo estoy haciendo… aahhhh!” allí quedó dentro todo el semen y fue sacando el pene d ese traserito de piel suave muy voluminoso “lo tienes de hembrita” sonrió viendo le traserito del niño estático que le ...
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