mi primera vez con un chico - Relatos Eróticos

mi primera vez con un chico

... redondo trasero, le chupe aquellas nalgas blancas, aquellos muslos delgados y abrí aquellas nalgas perfectamente redondeadas, descubrí aquella rajita rosada y virgen, ascendí besando su espalda y su cuello mientras su gemidos se sentían cada vez más intensos y me dijo Joel, soy virgen, le respondí, mejor, así nunca me olvidarás, le lubriqué bien su rajita y mi verga bien dura comenzó a forcejear para entrar en aquel trasero bellamente formado, cuando entró la cabeza, casi se desmaya en mis brazos, lo sujeté fuerte contra mí, mientras besaba su espalda y su cuello, cuando sentí su verga endurecer y decidí acabar con su virginidad, un quejido fuerte escapó de sus labios, pero seguí acariciando su cuerpo, hasta que me dijo, continúa ya me hiciste tuyo, quede quieto por unos instantes hasta que sentí sus gemidos y como me decía, hazme tuyo Joel, lo sujeté por su cuello y con su cabeza sobre la cama comencé a disfrutar de aquel trasero que había despertado en mi aquel extraño y morboso sentimiento, con el tiempo su placer era cada vez más intenso, le pedí que se colocara en posición de cuatro sobre la cama, Alexander acomodó su cabeza sobre la almohada y yo comencé de nuevo a follarlo intensa y deliciosamente, nos revolcamos por toda la cama, el suelo, sobre una la silla que usaba mi madre frente al espejo, sobre la mesa de noche, hasta que sentí como me corría dentro de su culito delicioso y Alexander estremecía su cuerpo al chorrearse bien penetrado, nos quedamos dormidos y al día siguiente después del examen, nos fuimos al atardecer para la playa a devorarnos nuevamente, así estuvimos jugando a escondidas y disfrutando de nuestro secreto, hasta que un día sus padres se mudaron a otra ciudad por el nuevo trabajo de su papá. Desde entonces no he podido dejar de sentir el deseo de disfrutar del trasero de un chico, porque al menos en mi caso, ninguna hembra disfruta tanto que le cojan el culo como un macho pasivo o versátil.