1. a la vejez...¡verga¡


    Fecha: 24/09/2020, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: gerardo latoya, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... la basura y sin ninguna pena me agaché dándoles mi mejor cara a los amigos. Se dieron cuenta en seguida que el culo estaba al aire y pusieron cara de no lo creo.  Entonces recobrado del percance me di la vuelta de nuevo y con una sonrrisa invitadora les pedi que se acercaran, cruzaron la calle todavía no sabiendo de qué demonios se trataba. Les invité a pasar al jardín y les dije: que les parece echarse un polvo matinal en un buen culo caliente que quiere su cocol, yo invito la chelas. Los dos se miraron como no queriendo comprender la invitación pero el mayor, más o menos, cuarentón ya traía un paquete algo grande, parecía que le deba gusto el trato o que traía un paquete de galletas en la bolsa. El joven, más o menos, ventiañero se alejó un poco  algo cohibido pero el otro se me acercó, me llegó como un golpetazo el olor a sudor de días, que me hizo chinita la piel y entonces yo le tomé el paquete y empecé a sobarlo de arriba a abajo y inmediatamente después bajé su bragueta y metí la mano buscando aquellito, traía unos calzonasos como boxer y yo no encontraba el pinche hoyo por donde sale el chamaco hasta que lo conseguí y pues para ser un acto al azar no estuvo tan mal. No era de concurso pero tenía unos diez y siete centímetros. cabezón y oliendo a orines, rodeado de una selva virgen de pelos y unos huevos grandes de los que dicen que dan mucho valor, por aquello de que cuando un sujeto hace algo valeroso la gente dice ¡qué huevotes! Me agaché y lo tomé con mis manos ...
    ... dándole chaquetazos de arriba a abajo, pero el tipo ya estaba en la jugada, lo metí en mi boca y empecé a mamar a plenitud, el hombre se retorcía de placer y yo también, lo saqué para  pasar mi lengua por el tronco y darle besos en la cabezota y saborear esos tremendos huevotes que la verdad me encantan. El tipo. obviamente sin pedir permiso ni dar cariños ni nada, ni siquiera un besito, quitó mi cabeza de su tronco y me voltió de un tirón, haciéndome sentir aquella puta con pantaletas que me sentía en mis fantasías, me recargué en una barda y medio me agaché para ponerle franca la entrada y el ni tardo ni perezoso apuntó al agujero, pues como dicen: pelo y agujero aunque sea de caballero y al sentir yo la cabezota tratando de meterse medio salté pero luego me acomodé y bajé mis manos para abrir mejor el agujero , el sujeto empujó y quebró lo que tenía que quebrar y empezó a empujar furioso. Dale, dale, dale y yo adolorida pero encantada. Al voltear para ver que había por allá atrás vi al jovenazo haciéndose una tremenda chaqueta y lo invité a unirse a la fiesta, se acercó despacio con la caña entre las manos y yo lo jale, lo tomé prestado y lo empecé a mamar en serio. El chamaco como buen chamaco no duró mucho, empezo a retorcerse y a echar dentro de mi boca una cantidad de mecos que parecía que el tipo no lo había hecho en meses. Se alejó mientras su tío. o lo que fuera, seguía en lo suyo. Dale, dale, dale y yo encantada, y al rato se empezó a venir en mi culo,me sarandeó por ...