mi madre Ana y un fetiche especial - Relatos Eróticos

mi madre Ana y un fetiche especial

... las tetas hijo.
Haceme la turca Anita.
Entonces me senté sobre los pechos de mi madre y ella amasó con maestría.
Mi pija no aguantó y derramé leche y leche en sus tetas y en su boca.
Breve receso y mas, quiero mas bebé.. La noche es larga
El morbo del incesto y la calentura que me producía saber que estaba cumpliendo mi fantasía de garchar con mi hermosa madre hacían que mi pija estuviera dura al toque.
Otra vez me la chupó y me decía guardadas mientras pajeaba. Bien durita se sentó sobre mi pingo y empezó a cabalgarme. Arriba y abajo meta y ponga. Franela a full. Mi madre se inclinaba apoyando sus tetas flamantes sobre mi pecho. La agarraba del culo mientras se seguía moviendo y los dos nos decíamos cosas súper calientes mientras mí madre me cogía.
Acabó una vez más y se giró siguiendo sentada sobre mi pija. Pero ahora podía ver su culote y lo manoseaba todo el tiempo.
Tocar el culo de mi madre Ana era tocar el cielo con las manos.
Cuando inclinaba su espalda le manoseaba las tetas desde atrás y la taladraba a pijazo limpio mientras ella gemía, decía guarradas y se masturbaba llegando a un cuarto orgasmo.
Mami es insaciable me dijo...
Y se me puso en cuatro.
Que espectáculo ver ese firme y carnoso culo de Ana. La agarré de las caderas y con el palo a full le entré el fierro caliente.
Tac, tac, tac le daba con todo.
Ella lloraba casi de placer y gritaba otro fabuloso orgasmo que la hizo temblar.
Año y medio sin coger te voy a dejar sin una. gota de leche ...

... bebé.
Que puta soy....me encanta que me cojas hijo.
Te amo bebé
Te amo Anita...
Cuando estaba por acabar me dijo, rompele el orto y dejamela leche en el upite. Quiero sentir
Tu leche adentro de mi culo.
No me hice rogar.
Amaba ese culo y esperé siempre ese momento aunque esa no seria mi fetiche mayor.
El culito lo tenia abierto porque mi padre le daba matraca por atrás.
Le dije que se acostara boca abajo y de a poco se la puse.
Mi ritmo fue de menor a mayor al compás de sus gemidos y movimientos.
Ana solo pedía pija y leche en el culo.
Ritmo acelerado y otra fantasía cumplida....
Toda mi leche derramada adentro del culo de mi madre.
Quiero sentir tu leche en mi concha.
Ya no puedo quedar embarazada así que el próximo polvo lo quiero en la concha.
Mamita te amo.
Sos insaciable. Pero soy tu esclavo. Me calentas como  ninguna mujer en el mundo. 
En un ratito se me para otra vez y así fue.
A los diez minutos con un poco de franela con Ana y pese a dos lechazos mi pija estaba para seguir garchando.
Otra vez misionero. Con esto regulo la fuerza y te garcho rico.
Este polvo fue magnifico.
Como ya había acabado dos veces no terminaría pronto, pero como la pija estaba dura le podía dar mucho placer a Ana. 
Y así fue. Diez o quince minutos de pijazos le clave en la concha y ella que gozaba y jadeaba como una verdadera puta acabó tres o cuatro veces mas con jugos que salían de su concha como aceite hirviendo.
Amo estas chanchadas...
Acabame hijito acabame otra vez, ...