Aprendiz de sumisa (2)
Fecha: 16/12/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: GatitaY, Fuente: CuentoRelatos
Esta fantasía consta de 3 partes, un autor me hizo el favor de cumplir mi deseo de tener un relato con alguna de mis fantasías, lamentablemente he perdido contacto con él y solo tengo 2 de las 3 partes, me gustaría que una autora o autor me ayudara a acabar mi historia si no fuera mucha molestia. Soy muy mala para escribir.
Espero sea de su agrado y cualquier comentario o sugerencia me pueden contactar a mi correo. Besitos.
*********
Me sacó al pasillo. Aún con mi dolorido culo a la vista y mis pequeñas tetas colgando.
-Vamos, vístete bien y ponte los zapatos. Esta prueba la has aprobado. Vamos a por tu segunda prueba. – me dijo mi Ama.
Coloqué mi falda, tapando lo que tapaba, pues no el tanga, que lo dejé en mi cuello. Guardé mis tetas en el sujetador y me coloqué el vestido. Me puse los zapatos y miré por la puerta del aula, que seguía abierta de par en par. Allí seguía mi amiga, a cuatro patas y completamente desnuda. Con su culo y su coño todavía rellenos por las hortalizas. Itzel tiró del tanga y yo la seguí tras sus pasos. Dejando allí a mí amiga, a la vista de cualquiera que pasara.
*********
Segunda Parte
Recorrí los pasillos de la universidad tras de Itzel, siendo llevada por el tanga de mi cuello. Lógicamente, los pocos estudiantes que allí había, a mí me parecieron miles. Pues cada uno de ellos no pudo menos que asombrarse de verme en tal humillante situación, siendo arrastrada por esa mujer. Además mi vestido, que de por si tapaba poco, ...
... al no llevar el tanga donde debería, hizo que más de un compañero pudiera comprobar hasta lo depilada que iba.
Después de muchos silbidos, comentarios y algún que otro insulto hacia mí. Llegamos a uno de los baños de la universidad. Itzel abrió la puerta del de hombres, lo que me extrañó muchísimo.
-De rodillas puta.- me dijo, aun en el pasillo.
Allí había dos chicos y tres chicas, que no podían mantener su boca cerrada al ver cómo me hablaba la pequeña Itzel. Cuando vieron como yo, sumisamente, me arrodillaba en el suelo, empezaron a reírse y a animar a Itzel, para que siguiera humillándome.
-¿Os gusta mi perra?- dijo ella, volviendo a cerrar la puerta del baño.
-Muy guapa.- dijo uno.
-¿Sabe mover la colita?- dijo una de las chicas.
-Claro que sí. La encanta mover la colita. Venga Yadira, demuéstraselo.- dijo Itzel.
Resignada a ser la perra de mis compañeros, hice lo que me pidió mi Ama, apoyando las manos en el suelo, como una perra cogida por el collar, en este caso, mi tanga. Empecé a mover mi culo. El cual, entre la posición de estar a cuatro patas y el movimiento, hizo que mi falda dejara de cubrir, lo poco que de por si tapaba. Dejando mi culo y mi coño, otra vez húmedo, a la vista de esos compañeros.
-¡Jajajaja! Mírala, si es verdad que mueve la colita como una perra.- dijo uno de los chicos.
-Y el coño lo tiene brillante, eso es que esta cachonda la muy cerda.- dijo una de las mujeres.
-Vaya culo gordo que tiene.- continuo diciendo su ...