El dia que le quité la virginidad a mi hijo
Fecha: 06/12/2020,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: Pedro, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... eran sus contracciones anales, intentando sacar el pene invasor.
-Me duele mucho… Empezó a quejarse mi hijo.
-Qué tanto? Aguantas?
-No, no aguanto. Siento que me estas rompiendo el culo, ouch.… Voy a llorar papá, sácalo duele…..
-Es que estamos en una posición difícil.
Le saqué lentamente mi hombría de su ano y al salir sentí como se quedaba atorada la cabeza por su esfínter. Tuve que dar un tirón para sacarla y al salir se escuchó un pop. Las piernas de Jaime temblaban, y mi pene palpitaba y se veía rojo.
Mi hijo se tiró otro pedo más fuerte que el anterior.
-Tienes ganas de cagar?
-N-no sé…
-Vamos a la cama.
Luego fuimos hasta la cama y ahí lo volteé a ver. Su cara era una expresión clara de excitación y placer, su boca abierta de gruesos labios rosados parecían desear un beso. Se lo di.
-Esto nos hace jotos?- me preguntó.
-N, Jaime. Soy tu papá y te estoy enseñando a darle placer a tu novia como todo un hombre. O a ti te gustan los hombres?
-Claro que no!
-Entonces no tienes nada que temer. Ahora súbete a la cama y ponte como perrito.
El obedeció y se puso en cuatro patas. Por lo mismo de no saber quedó con la espalda mal, yo lo ayudé a acomodarse para que sacara más el culete. Mi hijo abrazó una almohada con fuerza y escondió su cabeza en la almohada. Yo volví a mamarle un poco el culo, probando el sabor de mi propio presemen. Luego preparé mi segunda envestida. Esta vez lo hice con menos cuidado y se la dejé ir de golpe.
Jaime gritó y pataleó, ...
... incluso dejó escapar algunas lagrimitas, pero al agarrar su verga noté que la tenía bien dura. Lo agarré del cabello para que se levantara un poco y empecé a montarlo. Era tato el líquido preseminal que yo soltaba que ya escuchaba un sonido de como de “splat” cada que mi pelvis chocaba con sus nalgotas. Seguí bombeando y los quejidos de Jaime se fueron convirtiendo en gemidos de placer, a los pocos minutos ya se escuchaba su voz diciendo “mas, mas”
-Papá ya no puedo, ya no puedo aguantar. Me voy a correr…
-Tira toda la leche hijo, vacía tus huevos.
Mi hijo sin tocarse empezó a soltar chorros y chorros de semen sobre la cama. Parecía que no iba a acabar nunca.
-Ah, ah.. Jaime! Ya no aprietes tanto el culo hijo! -Le decía yo. Con cada disparo yo sentía como el interior de su culo apretaba durísimo mi verga y no pude evitar venirme también. Pronto llené sus intestinos de mi leche tibia y recién ordeñada. Doce chorros de leche espesa fueron a parar hasta lo mas profundo del culo de mi hijo.
No saqué mi verga del interior. Ambos nos dejamos caer en la cama y me acosté junto a el de cucharita, sin sacar mi verga.
-Ya te dejé el culo lleno de hermanos tuyos.
El volteó a verme y me sonrió. Jaime tenía los ojos a medio cerrar de puro placer.
-Es la mejor corrida de toda mi vida. Gracias papa.
-gracias a ti. Tienes un culo que parece de campeonato.
Le dije y le di una nalgada, el miraba como aún lo tenía empalado. Le ordené que se pusiera otra vez en cuatro patas y sin ...