-
LA ROMÁNTICA SAGA DEL VIEJO Y LA GORDITA
Fecha: 13/12/2020, Categorías: Hetero Tus Relatos Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
-¿Que quiere usted de mí, caballero? -No te hagás la Coca. -¿La qué? Es muy joven, no la conoció. -Sólo quiero algo sencillo y placentero: besarte los pezones, chuparte la concha y romperte el culo. -¡Ud. sólo me quiere como objeto sexual! -¡No, no, que OBJETO! OJETE es lo que quiero, y vos no sos un objeto sexual, sino un ojete sonriente. Mientras teníamos esta filosófica conversación nos desnudábamos mutuamente. Cuando me bajó los pantalones de un saque, con calzoncillos y todo, ya la tenía al repalo. Se prendió en una mamaba de locos. -Eh, eh, pará, no tanto, que me vas hacer acabar y yo quiero hacer más larga la diversión. -Bueno, está bien. ¡Vos no sabés cómo me gusta! Se dio vuelta y se inclinó sobre el sillón. Como siempre andaba preparado tomé la vaselina y le unté el ojete, mi glande… y adentro! -Esperá, no tan rápido, de a poco. -Bueno, de a poquito. -y se la mandé a guardar de una saque. -¡Rompeme el culo papito! ¡Cómo me gusta! Me di cuenta que había tenido una buena horma. -¡Ay, loco, me llegás a las costillas! -Bueno, es lo que quiero. -¡Esto es divino papito! ¡Cómo me gusta! ¡Todo lo que quieras! Y mientras gemía y se quejaba empecé el bombeo. Una maravilla, hasta que sentí las ganas de acabar. -Me viene, tesoro, ¿lo querés en el culo o preferís otro lugar? -Pasamelá un poco por la concha para que tenga mejor gustito y luego a la boca sí, sí, SÍ! Se puso de espaldas y levantó las piernas sobre mis hombros. Unos rapiditos bombeos en la ...
... concha. -Dale, dale… -¡Ya va! Se sentó rápidamente en el sofá y apenas tuve tiempo para que abriera la boca y saltara el esperma. Fue adentro, todito. -¡Aug, aug! ¡No tanto, me ahoga! Me la agarró con la mano para que yo no pudiera empujar tanto y acabé con gran sacudida. Me lamió prolijamente, la dejó limpita y brillante, sin desperdiciar ni una gota…, y seguía cariñosa, con la lengua lamiendo suavemente el glande…, tan suave… que me hizo tiritar de cosquillas… Ella –ELLA-, es realmente gordita, pero sólo eso, “gordita”, con una linda pancita para usar de almohada, o acabarle en el ombligo -entre otras cosas-, unos muslos ideales para que te tomen suavemente de la cabeza cuando se la estás chupando, unas espléndidas caderas acompañadas de un opíparo culo y lo mejor de todo, unas tetas fenomenales, grandes y firmes, donde cada cubana es un despelote, y unos pezones rozados y grandes como dedales. En fin una maravilla de 26 añitos. Él –YO-, un tipejo de 62, con un poco de pelo, algunas “kilitos” de más, no demasiados, que todavía permiten ciertos alardes sexuales, sin demasiada acrobacia, pero divertidos, y por esas cosas del destino fui a parar a la casa de un conocido para hacer un chequeo de algunos aparatos electrónicos…, y allí fue donde la vi, cordial, simpática, desprejuiciada, seductora y atenta al galanteo. “¿Quiere esto?” o “¿Quiere lo otro?” y así revoloteaba a mi alrededor…, pero solamente cuando no estaba el dueño de casa. No tenía idea de su relación ...