Mi Pesadilla hecha realidad =) - Relatos Eróticos

Mi Pesadilla hecha realidad =)

... estaba completamente húmeda y resbalosa, en ese momento mi verga endureció y no podría dejar pasar la oportunidad de imaginar en mi cabeza lo que la había puesto así, la tome de la cintura, la voltee y puse a gatas y comencé a embestirla fuertemente, le pase una almohada a mi mujer y le pedí mamara esa almohada como si fuera la vagina de su madre, y así lo hizo, he de decir que es la primera ocasión que mi esposa se viene a chorros, pues cuando estábamos cabalgando al máximo expulso de la nada mi pene y me chorreo todo el vientre y mi pecho con sus ricos jugos, la veía retorcerse de éxtasis y gritaba y gemía de una forma que no la había visto, su cuerpo era un volcán en erupción y de entre su boca solo alcanzaba a escuchar
“¡Hay si mi amor, así cógenos a las dos, así papito hermoso, nos encanta que nos des duro a las dos!
	De momento creí que había escuchado mal, pero cuando logro incorporarse de nuevo me dijo:
“Fue tan real, sentía como me venía y como mi madre se revolcaba al mismo tiempo cuando se la estaba mamando, sentía el sabor de sus jugos en mi boca y en verdad necesito sentirlos mi amor, necesitamos cogernos a mi madre, quiero sentir esto nuevamente y quiero que ella se sienta extasiada y feliz, quiero que sienta lo que tú puedes darnos mi amor, quiero ser amante de ella y que tú también la tengas de putita y a tu servicio mi amor, quiero verte darle duro, mientras ella me moja y mama la puchita, quiero que te la culíes y ver como lo disfruta y necesito que ella ...

... me haga venir de igual forma que la hice venir en mi fantasía, de verdad estoy muy cachonda y quiero correr a convencerla y poder disfrutarla ambos.
	Creí que era el momento de éxtasis, pero no fue así, nos metimos a duchar como cada sábado de descanso y antes de siquiera terminar de vestirnos ya la estaba llamando e invitando a comer a la casa, creo que tenía un muy buen plan, pues no lo pensó dos veces y en verdad comencé a sentir un cosquilleo extremo, de esos que te dan cuando tienes miedo y éxtasis a la vez, como cuando fue tu primera vez o como cuando le declaras tu amor a la chica que te gusta, he de decir que es placentero, pero a su vez da un tremendo miedo, pero estaba hecho, solo me restaba esperar a que llegara mi suegra, lo cual ocurriría dentro de 4 o 5 horas y ver que tenía planeado mi mujer, que por cierto le pidió que se fuera bien linda a su madre, le dijo que igual o más linda que el día de ayer, así que eso me emocionaba aún más.
	Nuestras comidas los fines de semana por lo general eran asados, asi que encendí el asador y comencé a poner carne, salchichas, chistorras y demás cosas ricas que nos encantaban, abri una botella de tinto y comencé a disfrutar del asado, cosa que me encanta, me relaja y me gusta, de pronto, sin aviso alguno me tocan la espalda y escucho la voz de mi suegra:
*Hola hermoso, como se la pasaron el día de ayer, ¿se divirtieron mucho?
-Si claro suegra, no tanto como al regresar a casa, pero sí estuvo divertida la velada, ¿y usted ...