1. Mi primera ves (La vecina)


    Fecha: 04/01/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: RecolectordeFlujoVaginal, Fuente: SexoSinTabues

    ... Estaba en el cielo. La negra: Creo que me voy a venir –y me metió la lengua en la oreja-. Estallamos juntos, la sensación fue tan placentera, que no nos dimos cuenta que una vecina, no sé qué tiempo pudo haber estado parada viéndonos. Vecina: ¡QUE HACEN! La negra se levantó de encima mío y se cubrió, avergonzada. Yo me quede ahí, sentado, lleno de flujos blancuzcos de la negra mezclados con mi semen y sudor de los dos. La negra medio levanto su ropa y se metió al baño. Yo seguía paralizado, no sabía cómo demonio había entrado la vecina a mi casa. Vecina: ¡Qué bonito, ya se me hacía raro que esta muchachita estuviera tanto tiempo aquí!… ¡Esto lo tienen que saber tus padres!. ¡Si eres un niño apenas!. ¡Bueno, un niño bastantito mayo! –haciendo un ademan de señalarme el pene con la mirada- ¡Mira nada mas con el muchachito y la zorra zopiloton!. ¿Se estaba aprovechando de ti verdad mi cielo? ¿Y entonces ya no entendía, había pasado de estar indignada a excitada y luego a “mama protectora”? Vecina: Anda cielo, vístete que tenemos que hablar los 3. La negra salió del baño, roja, muerta de pena. Yo no sabía qué hacer, ¡tenía 13 años! Así que nos justificamos diciendo que “nos gustábamos muchos” y “que sabíamos que no estaba bien”, “pero que YO la había forzado a ella” y cosas sin sentido que la vecina no creyó del todo. Vecina: ¿Me estás diciendo que él fue el que lo planeó todo? –Mirándome a mí-. Los 2 asentimos. Vecina: ¿Me estas queriendo ver la cara chamaca? Si es un niño aun, ...
    ... que malicia puede tener, ¿verdad mi cielo? Lo mejor es que te vayas y olvidaremos esto, no te acusare –dirigiéndose únicamente a la negra-; Pero eso sí, no quiero volver a verte por aquí. Y ya, termina de largarte de una buena vez. La negra salió apenada o enojada, no nos dio tiempo de despedirnos ni de hablar. Vecina: ¿Estas bien? ¿Cómo te sientes? Yo: Si, gracias Sra. Estoy bien… Sabe, no quisiera que… Vecina: No te preocupes cielo –pegándome la cabeza a sus pechos- no le voy a decir nada tus padres, esto será un secreto que guardaremos, pero tú tienes que guardarme otro secreto. Y ya no comprendía que pasaba. Vecina: HOY, de que todos duerman, viene a mi casa, mira, por aquí –y me mostro por donde había entrado a la casa- Tus hermanitas siempre vienen a mi casa por aquí. ¡Ni siquiera sabía que esa ventana podría abrirse! Era una casa rentada que le había dado a mis papas por el su trabajo y teníamos poco de habernos cambiado para allá. En esa ciudad ya teníamos cerca de 3 años. Vecina: Te vas a quedar paradito aquí y me vas a tirar 4 piedritas a la ventana. YO sabré que eres tú y saldré. ¿Y hablaremos de este tema, entendido? Recuerdo haber asentido nada más. Ahora sí que estaba en problemas. Estaba un poco desconcertado; primero, del susto ni había hablado con la negra, así que apenas se fue la vecina, le marque a su casa. YO: Hola, que susto. La negra: ¿Cómo entro doña esa? ¡Piche vieja gorda! ¿Qué te dijo? ¿Qué quería? ¿Nos va a acusar? ¿Nos vamos a seguir viendo? YO: No ...
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