Todo va mejor 3
Fecha: 15/02/2021,
Categorías:
Hetero
Tus Relatos
Autor: Caramelo, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Todo va mejor, sin duda. Esto no termina aquí. Espero que la posibilidad de volver a estar con las nenas se repita. ¡La pasé tan bien! Pero además mi mente calenturienta maquinaba si se daría la posibilidad de hacérsela por el culo. Claro, tenía que probar con Tuky primero. Estaba seguro de que si ella quería y lo hacíamos, Sarita no dejaría de prenderse al jueguito. O sea, próximo paso, convencer a Tuky y hacerlo con ella.
El miércoles siguiente, por supuesto, fui a su casa. Ya era un clásico. Si antes, cuando comencé, había pensado que si me aburría inventaría que tenía más horas de trabajo o cosa así, ahora pensaba que si realmente sucedía algo así, iría lo mismo, de cualquier forma. No quería perderme esa posibilidad nunca. ¡La nena estaba tan buena y le gustaba tanto!
Como siempre Tuky me esperaba en la puerta y el beso fue más ardiente que nunca. Pasamos a nuestra “rutina hogareña” y en el medio del “tentempié” le pregunté al oído; “¿sabés? Me gustaría hacerlo por la colita.”
-¿Uy sí? ¿No duele eso?
-No. Si lo hacés bien no pasa nada.
-Es que me parece…, digo, tu cosota es más gruesa que mi agujerito. En la conchita no hay problema porque se estira. Pero en la cola…
-Yo te voy a enseñar…
-¿Ahora?
-No ahora no. Tenés que prepararte bien, para que sea más fácil.
-¿Cómo qué?
-¿Viste que yo vengo a esos de las cinco? Bueno, tratá de almorzar lo más temprano posible, luego, a la hora, más o menos, te tomás algún laxante, pero poquito, la mitad de lo que sea la ...
... dosis…
-¿Si? ¿Para qué?
No le iba a decir que para no me salga la pija con mierda. ¡Ya me había pasado eso! No quería repetirlo.
-Es qué…, cuando te la tenga adentro, si no tenés vacío los intestinos te puede dar ganas de hacer caca…
-¿Justo en ese momento?
-Claro. ¡Y no sería muy divertido que tengamos que parar para que vayas al baño!
-¡Sería horrible!
-Bueno…, tomás un laxante y cuando tengas ganas vas al baño, y aunque estés media hora descargás bien…, quedás limpita…, te lavás bien… y listo, ¡impecable para una buena culeada!
Le dije la palabrota a propósito. Sabía que se iba a entusiasmar. Tuky era así, tan inocente, le gustaba la guarangada. Choto, concha, te la rompo toda, te lleno hasta la campañilla o hasta la garganta, mámamela rico… ¡Todas esa cosas le encantaba!
Le pedí que se parara. Quería ponerla en clima.
Levanté su pollera. Como siempre que venía, estaba sin bombacha. La di vuelta y le acaricie los glúteos.
-Abrítelos.
-¿Cómo?
-Agarrate los cachetes y separalos lo más que puedas.
Eso hizo. Le pasé el dedo por el ano, suavemente. ¡Qué hermoso lo tenía! Parecía que ya quería recibirme.
-¡Aaaahhh!
-¿Te molesta?
-¡No! ¡Me gusta!
-¡Lo tenés hermoso! Vas a ver como se dilata cuando te meta el choto.
-Siiii…, claro…
-Te voy a enseñar. Te gustará un montón.
-¡Estoy segura que sí! ¡Todo lo que vos me hacés me gusta! – Tuky reculaba para intentar que mi dedo entrara aunque sea un poquito. - ¿Y ahora no podemos ir a que me la metas un poquito, ...