1. Los ejercicios nocturnos de mi madre


    Fecha: 12/01/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Gerardjking, Fuente: CuentoRelatos

    ... eso se quitó su blusa deportiva, dejando libres sus gigantescas tetas.
    
    El vago sin decir nada empezó a comerse las tetas de mi madre. Ella temblaba de placer, se le notaba en su cara de zorra y en sus suaves gemidos. El tipo masajeaba, lamia y mordía sus pezones, dejando varios chupetones pos sus pechos. Mi madre le agarraba del cabello con la mano izquierda mientras que la derecha acariciaba su gran bulto a través del pantalón mugroso.
    
    —¿Tú también quieres salchicha?
    
    —Siempre, papi.
    
    Para este momento ya tenía la verga dura como piedra y sin más remedio me la saque para jalármela. Mi madre no va a correr en las noches, va a que se la follen en la calle como una perra callejera.
    
    Mi madre se puso de rodillas sobre la tierra, bajo el cierre de aquel sujeto y le saco el miembro que era muy grande y muy grueso. Enseguida se lo metió en la boca y empezó a chuparlo como una profesional. Lo hacía con una gran desesperación, como si se estuviera muriendo y el semen de este hombre sea el antídoto.
    
    El cabrón ese sacó su celular y se puso a grabar a mi madre que hacía de todo con su miembro: lamia la cabeza de aquella verga negra, chupaba los huevos y restregaba el semen por toda su cara.
    
    Después de enderezo un poco, levanto las tetas y envolvió aquella verga negra en ellas, haciéndole una rusa que el cabrón disfrutó a morir.
    
    —Sonríe para la cámara, putita. —Ella obedeció, se deja grabar sin problema—. Lo que daría para que tu hijo te viera así.
    
    —Ni lo ...
    ... pienses.
    
    —¿Él no sabe lo puta que eres?
    
    —No.
    
    —Entonces es imbécil, ciego o marica, porque si yo tuviera una madre tan nalgona y tan tetona como tú la follaría todos los días. —Guardó el celular y sujetó a mi madre de su cabello—. Ahora abre la boca, puta.
    
    Tanto yo como mi madre sabíamos lo que venía a continuación, y ambos sonreímos casi al mismo tiempo. Me alegro de haberla seguido, me alegro de haber presenciado esto.
    
    Aquel malandro que era un total desconocido para mi empezó a follar brutalmente la boca de mi madre sin piedad alguna. Su verga toda gruesa entraba y salía de la boca de mi progenitora sin darle algún momento para respirar. Le llenaba la garganta de golpe, sus arcadas se oían por todo el callejón y yo me vine un poco después pero no deje de masturbarme en ningún momento.
    
    El hombre no le dio ninguna tregua a mi madre que ya estaba casi vomitando, golpeando sus caderas para que la dejara respirar.
    
    Él se detuvo por unos segundos lo cual mi madre aprovecho para vomitar y toser, fue muy asqueroso, incluso para mí.
    
    Mi madre sacó una gran cantidad de mierda por su boca pero no le dio tiempo de respirar ya que el horrible amante la levantó del suelo y la puso cara a la pared, le bajó el pantalón deportivo y le insertó la verga de golpe.
    
    Desde mi posición no podía ver si se la metió por la vagina o por el culo pero ella chilló de dolor y placer como la vil cerda que es.
    
    Empezó a follarla con la misma brutalidad que antes, incluso más fuerte, a la ...