Mis sobrinas Andrea y Natalia (7)
Fecha: 28/03/2021,
Categorías:
Incesto
Tus Relatos
Autor: Fernando Morante, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... "¡Que rico, que rico!" siseó con los dientes apretados.
Después de eso le pidió a Matteo salir de ella y que se acostara en la cama. Aquella verga estaba apuntando hacia el techo. Ella acerco su cara hacia Matteo y empezaba a decir algo, cuando el presionó sus labios sobre los de ella, podía yo adivinar que la lengua de él se deslizó en la boca de Andrea. La vi entrecerrar los ojos, sujetarlo del antebrazo con su mano izquierda y devolverle el beso. Se estaban besando apasionadamente, podía ver que él exploraba con la lengua la boca de ella que sacaba su lengua al encuentro de la de él. En un rato mas era ella la que succionaba suavemente la lengua de él, que bajó su mano y empezó a pellizcarle suavemente un pezón.
Andrea separó su boca de la de él y viéndolo con cierta pasión, supongo que le decía que no deberían estar haciendo esto. Podía yo verla sacudir suavemente la cabeza. Pero no se le veía molesta o intolerante. Él le acarició la mejilla y tomándola por la nuca se inclinó nuevamente hacia ella y pasó su lengua sobre los labios de ella repetidas veces hasta que logró que abriera nuevamente la boca y volvieron a juguetearse mutuamente con sus lenguas.
Él se enderezó y le mostro la dura verga a Andrea, la sostuvo con una mano y lo acercó a los adorables labios de Andrea. Ella se echó atrás sorprendida, deteniéndole apoyando sus manos en la pelvis del maduro y por un momento pensé que el devaneo había terminado. Pero habilidosamente Matteo se agachó nuevamente a ...
... besarla y nuevamente Andrea aceptó la caricia, levantando la cara y abriendo la boquita, aceptando la lengua de él y brindándole la suya, ambos con la misma fruición que anteriormente habían manifestado.
Después de no mucho rato de estos menesteres, él empezó a masajearle los senos, mientras que las manos de Andrea dejaron de detener al intrépido galán y se fueron acercando al enhiesto miembro. Primero la yema de sus dedos lo tocaron tímidamente, después recorrieron toda la longitud de la misma manera, hasta que finalmente sujetándola con la diestra empezó automáticamente a pajear la endurecida verga, mientras que con la izquierda le acariciaba los huevos.
El beso continuó durante varios minutos, mientras ella se acostumbraba al bulto en sus manos, rompieron el beso y al bajar la cabeza Andrea se encontró frente a sus ojos el glande enrojecido mirándola fijamente, él simplemente moviendo sus caderas lo acercó hasta que empezó a pasarlo suavemente sobre los carnosos labios. La vi sacar la lengua y limpiar con ella la punta enrojecida, movió entonces la cabeza y dejó que todo el largo reposara junto a su mejilla. La vi que tenía los ojos cerrados y estaba hablando con él, quien mientras le contestaba también le restregaba la punta del glande en la mejilla.
¡Qué caliente estaba esto, mejor que cualquier película porno de la TV o en el cine! Era del mismo largo que la mía y pero aparentemente más gruesa también, con el glande en forma de hongo descomunal.
Volteó hacia arriba, ...