Mi debut como Anel - Relatos Eróticos

Mi debut como Anel

... las nalgas desde antes a algún otro puto.
-No Sabras, esta fresquecita, sin estrenar-apunto el otro- se ha guardado para nosotros, así que prepárate a saber lo que es bueno que hoy toca carne de putita limpiecita hahaha. A todo esto, ¿Cómo quieres que te diga mamacita? Jose no le queda a una hermosura como tu-Dijo Pipe mientras deslizaba su mano por mi espalda hasta llegar justo a donde inician mis nalgas, con su mirada clavada en mi escote.
Ya había pensado en un nombre desde días atrás, uno que sonara sensual pero sin pecar de vulgar, dulce y femenino a la vez: Anel, el nombre de una compañera de la primaria que siempre me había parecido la más guapa de toda la clase y cuyo nombre me resulto con el tiempo bastante original y erótico.
-Me puedes decir Anel Pipe. Usted también señor Sabras.-Respondí moviendo mis pies con algo de pena esperando su aprobación.
-Anel…-se quedó pensando Pipe- Hasta en el nombre eres putilla, pues si suena casi igual que anal. –Y se echó a reir-Seguro que eso es lo que traes todo el tiempo en la cabeza, ¿verdad preciosa?
Ahora fue Pipe quien me tomo del rostro y me jalo hacia su boca. Su aliento a tequila contrastaba con mi frutal sabor en los labios y lo dulce de mi perfume. Su beso fue menos intrusivo, conformándose con recorrer su lengua mis rojizos labios, pero de igual forma volví a sentir una ráfaga de adrenalina al sentirme tomada por un hombre para su deleite. Pipe, como Sabras, no desaprovecho la oportunidad para acariciar mi ...

... culo con ambas manos, metiendo la mano por debajo de mi falda, levantar mi hilo dental y acariciar la división de mis nalgas con sus gruesos dedos como buscando mi agujerito. 
No tiembles mamacita-Dijo Pipe para darme una nalgada y separarme de el.-Pues bien muñeca, vamos a pasarla bien. ¿Ya estás en ambiente o te falta?-Comento Pipe señalando una línea blanca que aun yacía sobre la mesa
Estaba ya en la cúspide psicotrópica, pero quería desinhibirme totalmente. Si iba a ser una mujer, la mujer de dos hombres, pues seria toda una mujer. Camine hacia el escritorio contoneándome, cruzando las piernas y alzando el culo con el paso de mis tacones para provocarlos aún más. En cuanto me agache Sabras me abrazo por la espalda y me tallo su ya erecto pito por en medio de las nalgas.
-Como me vas a pagar lo que te estas chingando, eh mamacita?-Dijo Sabras lamiéndome el lóbulo de la oreja y oliendo mi cuello-Vas a ver cómo me voy a cobrar una y otra vez todo lo que me debes cabrona y vaya que tienes una buena deuda…
Me estremecí, en parte por las salvajes lamidas a mi oreja, en parte por sentir un pene de verdad tan pegado a mi ano y por último por su aviso que auguraba una brutal cogida. Solo pude sonreírle -¨Como tu quieras cobrarme amor¨-Dije sorprendiéndome hasta yo misma por semejante provocación.
-Ehhh, Sabras, quedamos que yo iba primero, acuérdate. Yo la convencí así que me toca estrenar.-Interrumpio Pipe molesto.
-Ni madres- contesto el otro-Este culo es mío-Ladro Sabras ...