Después de una fiesta, el taxista. - Relatos Eróticos

Después de una fiesta, el taxista.

... tragué tan rápido como podía para no ahogarme. Me encantó. Estaba caliente y sabía muy bien. Después me levanto la cabeza y me besó un poco. Puso mi cabeza a trabajar otra vez. Por lo visto quería más y yo también. Me hizo parar para bajar mi asiento del todo y me hizo acostarme boca abajo mientras bajaba mis pantalones. Me empezó a dedear el culo y yo sentía que ardía. Se puso sobre mí y me la metió lentamente. Me dolía un poco al principio pero después me dolió más. Empezó a bombearme y el dolor pasó a segundo plano. Solo había espacio para el placer sentía que iba a acabar y que me iba a dormir del placer. Sentí que acabó un poco más después y me dió vuelta después de sentarse en su asiento y me chupo la pija un poco y estallé. Me la siguió chupando un poco más y después me besó. Nos vestimos, me dejó en mi casa, le dejé mi número y lo besé mucho. Cuando llegué a casa, corrí al baño y me dí una ducha. Pero me calenté de nuevo y me masturbé. Acabé, me vestí y ví que tenía un mensaje. Era de él y decía: "quiero verte lo antes posible, ahora descansá un poco, sos mío". Sé que no debería estar bien que alguien sea posesivo sobre alguien pero no puedo decir que no me gustó. Después de esa noche fuimos pareja secretamente por un tiempo.