Por tercera vez con mi ex suegra - Relatos Eróticos

Por tercera vez con mi ex suegra

... decir qué me estaba ordeñando, sus gemidos se convirtieron en gritos y su cara se deformo, le bese el cuello y grito , empezó a sollozar y mordió mis labios con fuerza yo no aguante más y me vine dentro , me separé un poco y se retorcía bajo mi cuerpo, le di un beso a sus pezones y se retiró de mi, se me escurría bajo mi cuerpo, quise tocarla y su piel se erizaba, se ponía como carne de gallina y jadeaba, me miraba y sonreía pero a la vez sollozaba.

-No puedo, no puedo me decía, siento rico y a la vez siento que me quema donde me tocas.  Recordé que alguna veces algo similar le ocurrió a su hija conmigo, no pensé que fuera a alcanzar un orgasmo de esa magnitud. Yo me baje a mamar su cosita aún escurriendo mi semen, chupe su clítoris y más gritaba y sollozaba.. queriendo escapar se dio la vuelta quedando en cuatro dejándome sus nalgas enfrente de mi cara, no la deje retirarse, mi erección seguía plena y se la volví a enterrar de un solo golpe, su cuerpo se desvaneció en la cama, por un momento pensé en qué se había desmayado pero a través de los espejo pude ver su cara extasiada, como tenía a mi alcance su culo con mis dedos pulgares se lo acariciaba hasta enterrarle uno, me costó un poco de trabajo pero no protestó poco a poco se recuperaba, su cuerpo estaba totalmente sudado al igual que el mio. Una vez que mis dedos se abrieron paso en su estrecho culo, me di a la tarea de jugar con el.para dilatarlo, ese culo tenía que cogerlo a como diera lugar.

-Con que mi putita ...

... verdad?
- Si papi, tuya cuando lo quieras, este cuerpo te estará esperando siempre que lo desees 
-Muy bien  putita, te voy a coger el culo, no lo aprietes ya sabes para que no te lastime.

No espere respuesta, sacando mis dedos le coloque la punta de mi verga que estaba muy lubricada con sus jugos vaginales. Despacio me fui introduciendo en su culo, gemía un poco y se intentaba quitar confirme entraba, la tomé del pelo y la jale para atrás y con el otro brazo la tomé de la cintura, cuando le tenía aproximadamente la mitad dentro me detuve
-Me duele papi, pero metemela, está putita está para complacerte mi amor.

Le solté el pelo con mis manos la tomé de la cadera y me salí un poco, empecé ese lento movimiento de meter y sacar pero sin dejársela ir toda, sus gemidos eran ahogados, de pronto sin avisar se la deje ir toda hasta que mi pelvis choco sus nalgas, no le di tiempo de nada, grito y yo seguí embistindola con fuerza no le daba tregua
-Si, Papi, así, así, aunque me duela me gusta, dame duro mi amor dale duroooo
Aunque no me lo pidiera yo lo disfrutaba, la cogía con furia, su culo cada vez se dilataba y se hacía más fácil y placentera la entrada y salida de mi verga.

El sudor perla a mi rostro, cada gota que caía e su espalda era un gemido de placer que daba, sin sacársela me tomé un respiro me fui acomodando de tal manera que la.hice girar sobre mi verga hasta colocarla de espaldas, una vez así empecé de nueva cuenta a darle con furia mientras nos besábamos, ...