Primera de muchas veces - Relatos Eróticos

Primera de muchas veces

... rico. Seguíamos así hasta que de un golpe me puso su verga sobre mi cara en un auténtico 69. Yo solo abrí mi boca e inicie la primer mamada de la vida, pero que delicia era esto. Que suavidad de glande, le daba besos por todas partes,  chupaba sus huevos, me daba con el an la cara, me la regresaba por todas partes. En fin era maravillosa aquella sensación, ella paró y me dijo te quiero comer. Ahí fue otra cosa pues esa no era mi intención. Me sente en la cama y le dije que yo solo quería su culo y a toda ella pero que no me gustaba que me cuidaran a mi, ella soltó una carcajada, y me dijo tranquilo que si usted no quiere no hay problema. Entonces venga y me cuela bien rico otra vez. Yo ni cortó ni perezoso me la acerque'ella se puso en 4 y sin mediar palabra se la metí, ya estaba un poco cerrada por lo que me dijo hayyy, despacio. Yo baje un poco el golpe y se lo metí todo pero despacio, luego empecé a darle más duro ella gemía yo sudaba éramos un par de almas embadurnadas por el sexo, algo especial y delicioso. Ella paró y me dijo que me subiera a la cama y me sentara sobre la baranda de la cabecera,  y luego se sentó sobre de mi clavandose toda mi verga en su delicioso culo, e inició un sube y baja endemoniada y exquisito la daba rápido y despacio aceleraba cuando quería y frenaba cuando quería, era algo sin ...

... descripción. Con su mano derecha inicia masturbarse, y era delicioso ver como la hacía. Brindaba sobre mi, se masturbaba y gemiamos de placer.
Yo la pare y le dije que se pusiera como al inicio ella se tiró a la cama levantó sus piernas y me dejó a disposición su adorado culo yo me coloqué de frente le puse la cabeza de la verga en su ano y se le empuje hasta solo ver los huevos colgando. Era maravillosa esta posición. Pues le podía tocar y mamar las tetas, verle esa cara de lujuria y ver como se masturbaba. Si eso era demasiado hermoso y morboso. Ella me dijo dale duro y aceleró su mano en su verga, yo le daba con todo lo que podía. Hasta que vi como se estremeció todo su cuerpo y salieron varios chorros de leche de su verga, al ver esto mi cuerpo también se estremeció y empujé con toda mi fuerza en su culo. Ella de nuevo me abrazo con sus piernas, yo solo temblaba mientras le soltaba toda mí leche dentro de su culo. Así como estábamos nos quedamos por unos minutos solo se escuchaba nuestra respiración y el pasar de los carros en la calle. 
Al fin nos separamos. Nos bañamos juntos, nos dimos unos buenos besos y nos vestimos. Yo al abrir la puerta le dije que seguiría buscándola, al que ella me dijo que siempre estaría ahí esperándome. Salí y me fui a buscar amistad amigos al bar donde siempre estaban. Y así terminé mi noche.