De Sexo, Drogas y Otros Placeres (Parte 4) - Relatos Eróticos

De Sexo, Drogas y Otros Placeres (Parte 4)

... auto-control. Sabras por su parte se puso de pie en la cama y de un salto llego al sofá, para ponerse frente a mí.
-Ya estoy listo para que sigas consintiéndome primor.-Y dicho esto me tomo el cabello en un manojo para dirigirme a su verga. Instintivamente y con los ojos cerrados abrí mi boca y una vez más comencé a chupar su moreno pito que en breve se puso duro dentro de mi boca. A pesar del placer que sentía, abrí mis ojos como pude y le dirigí la mirada para sonreírle pícaramente mientras le daba lengüetazos a su punta, con hilos de semen y saliva colgando de mis labios hasta caer sobre mi sugestivo escote.
-Me encanta chuparte la verga Sabras. La tienes bien maciza y sabrosa. Pero no sé si me vaya a entrar ¨atracito¨-le dije con voz inocente de niña curiosa para calentarlo aún más.
-Uff chiquita, con lo puta que eres no dudo que te quepan dos pijas a la vez. Seguro que esa cola se traga mi verga más rápido que tu boquita.
-Tu crees amor? No s…ahhh!-Mi respuesta fue interrumpida por la entrada de golpe del dildo a mi cola. Al parecer Pipe se había cansado de dedearme y había usado por fin el fálico juguete. Apenas estaba aclimatándome a tener el vibrador en el culo cuando este empezó a, vaya pues, vibrar con intensidad. Sentía delicioso en mi hoyito, mismo que estrujaba más el dildo con cada vibración de este mientras que Pipe lo sacaba y metía lentamente mientras configuraba el mejor tipo de vibración. Yo tan solo podía pujar y disfrutar el mete y saca con mis ojos ...

... medio cerrados y la verga de Sabras colgando frente a mi rostro.
-¿Quién te dijo que pararas?-Vocifero Sabras refiriéndose a la inconclusa mamada que de inmediato retome, introduciéndome su pija hasta el fondo, entre mis leves gemidos de placer y el zumbido que producía el consolador cada vez que entraba y salía de mi orificio. Saque el pene de mi boca para poder gritar:
-¡Ahhh, que rico Pipe, mi amooor. mmmm si, sigue, justo asi, no pares chiquito! ¡Que delicia, métemelo hasta adentro, ayy!.-Dije con la verga de Sabras en la mano rozándome los labios. Tras expresar mi deleite Sabras se inclinó para poder besarme con fuerza y brutalidad, mordiéndome el labio hasta que pude saborear la sangre brotar de la incisión. Introdujo bruscamente su lengua en mi boca, recorriendo mis encías empapadas de jugos masculinos y saliva con ella mientras que con sus manos abría mi escote, jalando mi vestido de los hombros a los codos y con ello tener total libertad para poder pellizcar mis endurecidos pezones y manipular mis pequeños pechos por debajo del sostén negro de encaje.
-Ojala tomaras hormonas para tener más chichis, namás eso te falto-dijo algo desmotivado-pero me conformo con estas tetitas de adolescente-repuso. Acto seguido se inclinó aún más para poder chupar mi busto, morder mis pezones y lamerme desde los pechos hasta el cuello, succionando mi lóbulo como desesperado.-Hueles como putita joven de Tijuana, pero me cae que tu estas más rica, no lo dudes muñeca.-Dijo a su vez que ...