Desde las tías a la “cariñosa” - Relatos Eróticos

Desde las tías a la “cariñosa”

... ¿Qué me hiciste?” “Nada, nada. Ahora vas a ver…, que no te duele más…” Y me empezó a subir y bajar, subir y bajar…, despacito, despacito… ¡Y me gustaba! ¡Me hacía sentir muy lindo! ¡Lindo, lindo! “¡Uy! ¡Me hago pis!” “No, no es pis, hacelo…, es lindo, te va a gustar, largalo, no tengás miedo.” Ni siquiera terminó de decirlo…, y me mojé toda. ¡Ahh…! Me sentí tan bien…, tan lindo…, me relajé toda, me tiré sobre su pecho, apoyando mi espalda… Él me volvió a besar y acariciar, las piernas, la cola, el pecho, puso las manos bajo mi blusa y me acaricio las mini tetitas., me pellizcaba los pezoncitos y me apretó fuerte… “Ahora vas a sentir algo lindo…” Se sacudió, casi me ahoga, de cómo me apretaba…, y sentí y un líquido calentito dentro de mi cachucha… “¡Aaaahh!” Hizo así en mi oído, besándome el lóbulo. “¿Estas bien preciosa?” “Si, si, no me duele más. Pero me siento llena de líquidos.” “Eso que vos creíste que era pis, fue tu orgasmo, lo que le sucede a las chicas cuando algo les gusta…, y luego sentiste el mío. Se llama semen lo que te metí…, y… ¿sabés por qué te descargué mí semen?” “No, ¿por qué?” “¡Porque sos muy hermosa! Mi leche quería estar dentro tuyo…, para que te sintieras bien…, y yo también… ¡Nada más hermoso que estar con vos!” Con todo eso que me dijo yo no pude hacer otra cosa que besarlo. ¡Y el abrió mi boca con su lengua! ¡Me fui al paraíso!
-¡Qué bien! ¡La pasaste bárbaro! Nunca me lo habías contado… - Patri estaba algo confundida. 
Dudaba de la inclinación ...

... hetero de su amante. Romi no le dio importancia y siguió.
-Mi primo sacó un pañuelo de alguna parte y me dijo que lo pusiera entre mis piernas, y me subió la bombacha. 
“Ahora vamos. Seguro que ganamos…” Fuimos hacia el costado, donde estaba la pileta. “Andá a ese baño y lavate bien. Que no te chorree nada…” Y… eso es todo…, aunque luego él me explicó porque había sangre en el pañuelo.
Yo pensé que había hecho una cagada…, haber traído a un primer plano la fase hetero de Romi. ¿¡Si había gozado tanto cogiendo con varones…, como es que luego se convirtió en lesbiana!? ¿Será efectivamente así? ¿Cómo lo arreglo? Es peor que lo yo creía cuando empecé a frecuentar a “las tías…”
-¿No hubo más? – Patri insistía…
-Si, muchas veces, cada vez que nos encontrábamos, buscábamos algún lugar y lo hacíamos… Cuando entré a la secundaria…, él ya tenía 19. Me había venido la menstruación, así que no acababa más dentro mío…, hasta que un día me dijo si me gustaría tenerla en la boquita… Yo ni se la había chupado siquiera…, así que le dije que sí… Había visto fotos que me enseñaron compañeras…, y me pareció lindo… Me gustó mucho cuando la probé. Me pareció muy rica… ¡Jajaja! – Romi se reía de sus gustos juveniles. - Desgraciadamente se mudó con sus padres a una ciudad donde había una universidad… y cuando lo volví a ver…, vino con su novia…, me dio un besito en la mejilla… y no se habló más del asunto.
-Bueno… fue agradable para vos. Te trató muy bien… 
-Si, muy bien…, pero su ida me dejó ...