CORTOS SEXUALES - Relatos Eróticos

CORTOS SEXUALES

... retiré el servicio y tomándole sus manos le dije :"Vení Ana,bailando vas a calmarte".
Ambas,de pie,en medio de la sala,enrede su cuerpo y empecé a hamacarme al ritmo,suave,de la música que envolvía el ambiente.Lentamente, empezó a serenarse y también,su cuerpo se fue amoldando a los acordes.No puedo precisar en que momento,los cuerpos empezaron a rozarse,a frotarse.Pero,los espacios entre nosotras se habían estrechado.Sentia su respiración densa cerca de mí oído,y,también sentía como ese,leve, contacto erizaba mí piel._
Para bien o para mal,la experiencia vivida en el viaje al exterior con mí marido y aquel showman me dejaron una enseñanza,
"Cuando el placer se presenta iGOZALO!"
Mis manos empezaron a deslizarse por los costados de su cuerpo, recorría sus muslos hasta encontrar el fin de su pollera.El contacto de la piel de mis manos con la piel afiebrada de sus piernas la inmovilizó.Antes de que siquiera,intentará reaccionar, incliné mí cabeza hacia atrás y pude ver el terror y el deseo pintado en su rostro a ver qué el mío se acercaba a su boca.Mis labios se cerraron devorando los suyos.Mi lengua se estrelló contra sus labios apretados obligándola a separarlos permitiendo mí invasión.Mi lengua busca la suya.La encuentra,la enreda,la envuelve.Mis manos suben por su piel caliente,erizada en el movimiento arrastro su pollera hasta enrollarla en su cintura.Su voz esfuerza una modulación ronca,densa
:"Soniaaa,que haces?Queee estamos haciéndo?".Mis dedos recorren sus labios ...

... húmedos,mientras mí otra mano aprieta sus nalgas.Mi nombre es,casi,un silbido que escapa entre sus labios apretados:"iiSoniiiaaa,nooo,nooo!!".Pero,sus caderas acompañan el ir y venir de mis 2 dedos dentro de su vagina.Por algunos instantes abandono su piel y libero su cuerpo y el mío de las prendas que impiden que,ambas,juntemos nuestra excitación que a estas alturas ya es un río desmadrado.Sus manos se unen a las mías.Todas acarician,tocan, recorren.Los dedos hurgan,separan,
penetran.La hago retroceder hasta el borde de la mesa para poder presionar mí sexo contra el de ella.Nos refregamos,nos frotamos.Gemimos y jadeamos.Nuestros jugos corren,
generosos y mezclados por muslos,por piernas,por cuerpos sin identidad.En la cima de mí lujuria,por sobre su hombro,
mis ojos visualizan la frutera.Mezclados entre los frutos sobresale el extremo de un plátano.Mi mente alucinada,de manera inmediata,lo transforma en un poderoso miembro masculino.Avanzo mí mano,al retirarlo,en su base está unido a otro.Sin poder evitarlo,los 2 abandonan la frutera.Como no podía ser de otra manera en este país,sus proporciones son pantagruelicas.Mi mano,casi,no alcanza a rodearlo y al intentar separarlos,mí temblor hace que uno de ellos caiga sobre la mullida alfombra.Mi boca se abalanza sobre sus pechos y mí lengua castiga,furiosa,sus pezones.Mi mano se escurre y separa sus muslos.
Deslizo la,tremenda,fruta y al llegar al centro de su humedad,intenta una vana y no deseada defensa.Debido a la cantidad ...