Lorena y Gerardo. Más que hermana y hermano
Fecha: 25/01/2018,
Categorías:
Gays
Autor: Quique., Fuente: CuentoRelatos
... bata y se acarició las tetas con las dos manos. Tenía que masturbarse para quitarse el calentón y no sucumbir a la tentación de cometer un incesto con su hermano. Se quitó las bragas y con tres dedos de su mano derecha empezó a tocar la guitarra con el clítoris... Se miraba al espejo. Se acariciaba las tetas con la mano izquierda y de vez en cuando dejaba de tocar la guitarra de una sola cuerda y metía dos dedos dentro de su vagina para humedecerlos.
Estaba tan cachonda que no tardó en sentir que se iba a correr. Cogió las bragas, las olió, y las metió en la boca. Llevó el dedo medio de la mano izquierda a su panocha, lo humedeció y después se lo metió en el ano. Se metió dos dedos en la vagina, y se folló culo y panocha al tiempo que acariciaba el clítoris con la palma de la mano... Al ratito se corrió pensando que el dedo que tenía metido en el culo era la picha de su marido y los dos dedos que tenía metidos en la panocha eran la picha de su hermano... En el espejo se reflejó su cara extasiada con los ojos entornados. Temblando, se fue encogiendo con el placer que la sacudía. Las bragas dentro de su boca ahogaban sus gemidos. Al acabar de correrse, se sentó en el piso de baldosas. Sacó las bragas de la boca, y con la mano del dedo que tenía en el culo acariciando sus tetas y lamiendo como una perra el pequeño charco de jugo de su corrida que tenía en la palma de su mano, susurró:
-¡Dios mío, qué pedazo de corrida!
Se lavó la cara, las manos, el culo y la panocha. ...
... Se puso las bragas y la bata y volvió a la sala. Al verla, le dijo Gerardo:
-¡Qué cara de felicidad traes!
Volvía con la idea de cortarlo.
-Es la que se me queda después de cagar.
-¡Ahí va, qué bruta!
-¡A ver si así te callas de una vez por todas!
-¡Si supieras cuan hermosa te veo!
-Calla de una puñetera vez, cansino, que eres un cansino...
Más tarde, cenando en la mesa de la cocina, le preguntaba Gerardo a Lorena:
-¿Quieres mucho a Luis?
-Claro, es mi marido.
Gerardo, volvió a las andadas.
-¿Te comía el coño?
-¡Cómo te atreves a preguntarme semejante obscenidad!
-¿Si no fuera tu hermano dejarías que te lo comiese?
-No, ni me lo pensaría. A ver, Gerardo, has visto el contorno de unas tetas y unas piernas y te has vuelto loco. ¿No te das cuenta de que eres un inmaduro?
-Madúrame.
-Vas a piñón fijo.
-Voy. ¿Me dejas que te mire las piernas y las bragas por debajo de la mesa?
-¡Tú no estás bien de la cabeza! ¿Para qué quieres ver mis piernas y mis bragas?
-Para imaginar cosas cuando esté a solas en mi habitación.
-¡¿Y tienes cara a decirme que te vas a masturbar imaginando que me haces cosas?!
-Que te hago cosas y que me las haces.
-¿No te dará reparo fantasear con tu hermana?
-Lo que me dará es morbo.
-Hay millones de chicas más guapas que yo.
-A ninguna la quiero como a ti.
-Yo a ti también te quiero, pero es otra clase de cariño. ¿No te masturbarías ya pensando en mí?
-Mujer, mi habitación está ...