1. Playa Uva


    Fecha: 02/02/2018, Categorías: Dominación / BDSM Autor: PalabrasDeTe, Fuente: CuentoRelatos

    ... jóvenes lo tenían como una fantasía. Mi mujer se acercó y enseguida metió su mano entre mi camisa para sobarme el pecho. Miro a Lucrecia y ella se acercó. Le dijo que me abriera los botones. Me beso y Lucrecia hizo lo que Lucia le había dicho. Se alejó de mí y le extendió la mano a Samuel. Él se acercó. No hablaba, pero no negaba a nada. Mi mujer me besaba, él también la besaba en los brazos. Los cuatro estábamos muy juntos. Lucia se acercó a él y lo beso. Lucrecia en vez de imitarla, bajo, me abrió el pantalón y empezó a mamarme el guevo. Lucia sonrió y siguió el juego. Samuel seguía parado mientras veía impresionado como su mujer me lo mamaba, y cuando entendió lo que pasaba, Lucia tomaba su guevo con su mano, abría la boca y le miraba a los ojos mientras se lo metías todo hasta el fondo.
    
    La excitación de él fue tal, que la levanto y la volteo. Le tironeo con fuerza el short hasta bajárselo. Dejo su blusa mientras su culo quedaba al descubierto y le hizo poner las rodillas en el borde del sofá. Agarro su guevo y se lo metió desesperadamente mientras le tomaba con fuerza por la cintura. Lucia jadeaba y gritaba casi en mi cara mientras me decías que Samuel tenía un guevo divino y que le gustaba como la cogía. Lucrecia se levantó y se desnudó. Termino de desvestir a Samuel mientras lo acariciaba y veía su guevo entrar en la cuca de mi mujer. Los cuatro estábamos desnudos. A Lucia solo le colgaba la blusa blanca abierta que dejaba ver sus tetas pequeñas y blancas que se ...
    ... bamboleaban mientras Samuel la penetraba con mucha fuerza.
    
    Unos minutos antes estábamos listos para dormir y ahora sabíamos que la noche sería muy larga.
    
    Así fuimos intercambiando. Yo me cogí a Lucrecia, me cogí a mi mujer. No sé cuántas veces lo hicimos y eran solo las doce. Nos fuimos a bañar y decidimos irnos a dormir.
    
    Estando Lucia y yo acostados, nos dimos cuenta que queríamos más y cuando subimos, ellos estaban saliendo desnudos de su habitación para ir a la nuestra. Su cama fue el encuentro para que al final los cuatro cogiéramos sin tabú. Lucrecia le pidió a Samuel se pusiera en cuatro: "Mi amor complacerme en algo que siempre he querido y nunca pensé sucedería. Confía en mi" le dijo mientras nos hacia una seña. Ella se sentó frente a él, recostándose del respaldar de la cama y le tomo su cabeza para que le mamara la cuca. Miro a Lucia y empezó a mamarle el culo. Luego yo me puse detrás de él, lo penetré suavemente y Lucrecia le pidió se relajara. Que se dejara.
    
    Él se resistió al principio, pero ella le pidió que quería verlo. Era su fantasía. Yo fui el primer hombre que lo penetraba y luego de unos minutos él mismo me pedía lo hiciera con más fuerza.
    
    Lucrecia lo acariciaba y se masturbaba. Le decía que le excitaba ver como lo cogían. Mi mujer le susurró al oído, aunque todos lo escuchábamos " Samuel, después quiero tú le hagas lo mismo a mi marido" Él asintió y yo me sonreí.
    
    Nos venció en la madrugada el cansancio y el alcohol.
    
    Nos fuimos quedando ...