SUCUMBIENDO AL PLACER - Relatos Eróticos

SUCUMBIENDO AL PLACER

... me ofrecía ser mi hombre en ausencia de su padre. Tenía necesidad de sentir su verga en mi interior y no iba desperdiciar la ocasión de ser poseída por mi joven y dotado hijo , busque su verga con mi mano y se topó con un garrote majestuoso, grueso y caliente que palpitaba entre mis nalgas.

Espera un momento, le dije, solo quiero asegurarme que tu hermana duerme... fui y le hablé por su nombre, Karla, Karla,! y ella tenía sueño profundo. 
Regrese con Marco para abrazarlo y besarlo en la boca como si fuera mi novio y le dije: Nunca tu padre debe saberlo! Por favor.

Claro, no sabrá no te preocupes madre! Lo tomé de su verga y suspire...damela,  quiero sentirla, pero no aquí, vamos a la pileta donde nos bañamos, no quiero tu hermana nos escuche,!

En silencio camine delante de él y al llegar, me incline para mamar su verga, ! Es muy grande Marco,! Me harás feliz, muy feliz hijo!  Te quiero coger ese culo, me pone loco, me duele la verga de tanto desearlo madre! No pude mamar más que la mitad y mi calentura era tanta que me pare y me voltie para ofrecerle a mi hijo mis amplias caderas y nalgas para que lo gozara en el silencio de la noche. Cuando me penetro , me vino un terrible orgasmo y me rmpujo completamente su virilidad. ¡Auggggg! Ohhhhhhh! Me matas hijo!!! Dame toda mi niño!! Y me cogio  allí parada,  nose cuantas veces me chorree como una madre perra que soy. Esa misma noche le di permiso de amarme el culo y se volvió mi amante cuando su padre se ausenta. Cada noche lo espero en la pileta para que me folle y me haga correr, mientras su hermana ve la TV. Y cada madrugada cuando me busca, en la hamaca   me coge como todo un hombre.  Mi culo se acostumbró a su verga y supo satisfacerse como mujer, se que un día se casara , pero tendré el privilegio de tener sus visitas.