Esposa sumisa (Parte II): El médico maduro me lleva a casa
Fecha: 09/03/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Omar67, Fuente: CuentoRelatos
... tocar tu panocha, estoy seguro que ya estas más que mojadita verdad putita?? —y yo calladita solamente atine a abrir un poco las piernas.— Ábrelas más cabrona que te voy a tocar esa panochita que esta sedienta de verga seguramente.
—Doctor por favor no sea grosero, ni me esté insultando ni diciendo esas cosas... —yo me hice la enojada más sin embargo me quede con las piernas un poco más abiertas.
—Ohhh que bien Amy así me gustas que seas obediente... Guauuu pero si estas depiladita verdad putita? —Él lo noto al meter un poco sus dedos por entre mi pantalón y mi tanga.— Como que sabias que alguien te iba a cachondear verdad cabrona puta?
—No me diga esas cosas por favor, yo soy una mujer decente... —Aunque por dentro me excitaba que me dijera esas cosas, algo que jamás lo pensé. De repente sentí ya sus dos dedos tocándome mi cosita.
—Ves putita, que si estas toda empapada, yo sabía que tras esa carita de ángel y de señora seria, se esconde una puta reprimida... —Y me empezó a acariciar tan rico que yo solo ya me quedaba quieta y callada, el solo oía de mi unos suspiros y jadeos.
—Ohhhh ahhhh mmmm Doctor que me hace? Déjeme por favor... ...
... ahhhh ya déjeme ya déjeme... puede entrar alguien y vernos... mmmm ya quite su mano de ahí...Ya Doctor que me siento tan rara haciendo esto.
—Mira Amy como me tienes... —y hace que baje la vista, la verdad no sé en qué momento se había sacado su pene, pero era un pene súper enorme, grueso, con venas, jamás había visto otro pene más que el de mi maridito, pero la verdad nada que ver, era casi el doble de grande, mucho más grueso, yo me quede como hipnotizada viéndolo, el solo sonrió y dijo:
—Te gusta verdad putita? Te aseguro que tu esposo no tiene nada parecido a esto verdad, agarrálo putita, sé que estas deseosa de tocarlo.
Yo como autómata solo atine a poner mi mano en ese enorme pedazo de carne, lo sentí duro pero a la vez suave, ya hasta estaba como con baba ya que estaba el también súper excitado y con ese enorme pene bien levantado.
—Ohhh doctor por favor ya déjeme ir... no quiero tocarlo... por favor...
De repente oímos pasos y ruidos como que alguien venía a la cafetería.
El solo alcanzo a decirme:
—en la mañana que salgamos a las 8:00 am te esperare en el estacionamiento para llevarte a tu casa putita, nos vemos.
Continuará