SOLO ANAL
Fecha: 19/03/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: dulces.placeres, Fuente: SexoSinTabues
... suyo, de bajo perfil, se mantenía al margen de los conflictos y era bien vista por los altos mandos. Mi curiosidad femenina hizo que fuera preguntando demasiadas cosas de su vida, de su infancia, de cuando había cambiado y de las tantas operaciones que tenía, y a cambio de su historia yo le conté la mía. Así fui un par de veces a cenar a su casa, y ella a la mía y en una de esas veces… Se había hecho demasiado tarde, entre charlas y charlas no nos habíamos dado cuenta de la hora que era, le pedí a Leila que se quedara a dormir, solo por esa noche, improvisamos una cama en el comedor y yo le dejé mi cuarto a disposición, le dije que usara lo que quisiera, que se pusiera cómoda. Así, tras el último café nos despedimos, y cada una se fue a dormir pos su lado. El sol del amanecer del Domingo me despertaría calentando mi rostro, me levante, hice mis cosas, desayuné y viendo que Leila no aparecía a pesar de los ruidos que estaba haciendo en la cocina me dirigí al cuarto, me detuve a contemplarla, dormía plácidamente boca abajo, con un baby doll carmesí transparente de mi propiedad y una tanga blanca perdida entere las nalgas de su enorme culo, me dieron envidia sus formas, su piel era suave, perfecta, me sorprendí al notar mis pezones duros, traté de apartar la imagen de mi mente. Leila giró sobre si, aun dormida sin saber que yo la observaba, ahora si me herviría la sangre, su pecho derecho se había escapado de la ropa interior, si bien era pura silicona lo cierto es que era del ...
... tamaño de mi cabeza, enorme, con una gran aureola rodeando su sabroso pezón, pero mi mirada se centraría en otra parte, más abajo, su verga rígida había escapado por sobre la diminuta tanga, era enorme, jamás había visto algo así, hasta tapaba su ombligo! gruesa como ninguna, de pequeña cabeza circuncisa, me lamenté porque sabía que a mí no me serviría para nada y en esa situación fue que Leila abrió los ojos para sorprenderme espiando… - Buen día dormilona! - Buenas… perdón! Lo siento… Fueron sus palabras al notar que su miembro estaba desnudo ante mis ojos, al tiempo que trataba infructuosamente de ocultarlo bajo la tanga - Está bien… dejalo, no te preocupes… Entonces fui sobre ella por la cabecera de la cama, invertida, apoyé mis labios sobre los de ella, la besé y ella respondió a mis besos, cerré los ojos para disfrutar su placer, sus manos entonces apretaron con suavidad mis delicados pechos, la dejé hacer, avancé un tanto para detener mi cara sobre sus tetas, liberé con mis dientes la que aun estaba oculta, les di masajes, me costaba abarcarlas, me sentía extraña, me gustaba, llené de saliva sus pezones, me quedé contemplándolas, ella respondía de igual manera, mi pechos estaban en su boca, los mordía delicadamente, mis pezones excitados mandaban descargas a mi entrepierna, me resultaba difícil concentrarme en todo, mis ojos fueron entonces más abajo, a ese glande rosado que escapaba expectante de su tanga. Me moví un poco más aún, para llegar a ese fruto perdido, lo ...