Una fantasía hecha realidad - Relatos Eróticos

Una fantasía hecha realidad

... si ella estaría dispuesta a cumplir nuestra fantasía de hacer un trio con mi esposa y la ocasión se presentó en ese momento, en la cual platicábamos, de que postura la hacía gozar más, ella me comento dos o tres posiciones y le dije que las haríamos para su goce. Y, por cierto, le dije:

-nunca se te ha ocurrido imaginar a alguien mientras te hago el amor?

-cómo? No entiendo -me dice Isabel.

-Me refiero a una fantasía sexual, todo mundo la tiene, yo la tengo, Betty la tiene también, claro solo es eso… fantasías para hacer el momento más agradable.

-Pero porque me preguntas eso? ¿Es que tú tienes alguna fantasía que no hayas cumplido?

-No soy yo, es mi esposa quien un día me confeso su fantasía y simplemente te preguntaba por curiosidad, para saber si todas las mujeres tienen las mismas fantasías -le contesté.

-Y cuál es la fantasía de tu esposa? -me preguntó.

Le conté el suceso que había tenido con ella y la plática posterior en la que me manifestó su interés por las mujeres.

Isabel se quedó callada un momento, y de repente me dice:

-Mira Amor, lo mío no es fantasía, pero siempre he tenido la curiosidad de saber que se siente hacerlo con una mujer, pero no cualquier mujer, sino una que me atraiga, que haya cierta química, solo así lo haría yo -me dijo.

-Pero es curiosidad te repito, no es fantasía –remató.

La curiosidad de Isabel era mucha en ese momento y me preguntó.

-Cuéntame con detalles lo que te dijo tu esposa.

Una vez que le ...

... conté con detalle y un poco más que le agregué yo, me di cuenta que comenzaba a interesarse.

Contestándole todas las preguntas al respecto que me hizo sobre Betty.

-Y como es tu Esposa… me refiero a su carácter, físicamente.

Le hice una descripción detallada de Betty.

Las respuestas que recibió a sus preguntas le satisficieron, hubo un minuto de silencio en donde ella pensaba y viéndome a los ojos, me dice:

-¿Y dices, que posiblemente yo sea de agrado de tu esposa?

-Claro que si -le dije- Eres la mujer ideal -y añadí- eres una mujer muy femenina, cautivas desde la primera vez y sé con certeza que Betty caerá a tus encantos, los cuales son muchos, amor.

-¡Adelante!, ¡si crees que yo soy de su gusto hagámoslo!, quiero ver que se siente.

-Y tú, ¿qué papel juegas en todo esto? -me preguntó.

-Yo solo las miraré -le contesté- También tengo una fantasía, como te dije y que mejor que las mujeres que amo lo hagan para mí, ¿estás de acuerdo?

-¿Pero cómo le haremos para que ella y yo nos conozcamos? ¿Cómo vas a justificar mi presencia, si me dices que casi no tienen amistades?

-No sé, sinceramente, ya pensaré en algo para que Betty no se dé cuenta de lo que planeamos.

En días posteriores le mostré fotos de Betty a Isabel, con bikini, con ropa interior, de frente, de perfil, en fin… Isabel vio el cuerpo de Betty y yo, observaba como que se le quedaba mirando fijamente y me decía:

-es bonita, tiene bonito cuerpo, me gusta tu mujer amor.

Pasados unos ...