1. Jennifer: Mi vida.


    Fecha: 02/04/2018, Categorías: Hardcore, Autor: lujuria69, Fuente: xHamster

    ... hizo gritar de dolor para, agarrándome con fuerza de la cintura, obligarme a girar en redondo y colocarme boca arriba con el propósito de ponerme unas pinzas en los pezones y facilitar que otro chico me introdujera su cipote hasta el fondo por delante con lo que me desvirgaron al mismo tiempo la almeja y el culo. El joven que permanecía tumbado sobre mí, además de darme unos buenos envites vaginales, no dejaba de apretarme las tetas; de insultarme y de decirme que me moviera para acrecentar su gusto cosa en la que, aunque hubiera querido, no podía complacerle al encontrarme emparedada entre ellos. Mientras seguía oyendo los gritos desgarradores de Agata y algunas quejas de Virginia, que al igual que yo no opuso mucha resistencia al temer por su integridad física, notaba perfectamente como sus nabos, que eran de un tamaño bastante normal, aumentaban de grosor y largura en mi interior hasta que, primero, el que me “trajinaba” vaginalmente, que continuó tirándome y unos minutos más tarde el que me enculaba, “descargaron” y me mojaron abundantemente. En cuanto me sacaron su pene y aprovechando que había quedado tumbada boca abajo, se mearon en el exterior de mi trasero. Como tenía el ojete muy abierto buena parte de su pis me cayó dentro del culo haciendo que me tirara varios pedos y que volviera a defecar en escasa cantidad.No había tenido tiempo para recuperarme cuándo noté que otro chico y el hombre de mediana edad procedían, de nuevo, a penetrarme al mismo tiempo por delante ...
    ... y por detrás y que este último, que se había decidido a ocuparse de mi culo, estaba dotado de una picha de unas dimensiones considerables. Pero estaba rota y aunque me hizo muchísimo daño al “clavármela” por el trasero ya no me quedaban fuerzas ni para gritar por lo que me cepillaron, me echaron su leche y me hicieron todo lo que quisieron, incluso intercambiar sus posiciones después de eyacular hasta que al cabo de varios minutos decidieron mearse en mi boca para que tuviera que beberme su pis, tomando por primera vez contacto con la micción masculina, con lo que volví a devolver. De nuevo, terminé acostada boca abajo y el hombre que me había enculado, después de escuchar que uno de los chicos le decía que las otras dos putitas no daban para más y de quejarse del poco aguante que tenían, procedió a insultarme mientras me introducía sin la menor delicadeza su puño en el trasero. No sé el tiempo que duró aquel fisting pero lo que sí que recuerdo es que chillé todo lo que quise puesto que me hacía muchísimo daño; que sintiéndome totalmente descompuesta volví a vomitar y a que, al final y a cuenta del dolor, llegué a perder el conocimiento.Cuándo lo recobré estaba muy mareada y llena de mierda puesto que aquellos guarros, además de haberme forzado al máximo para sacarme hasta el último gramo de mis excrementos, se habían cagado encima de mí. Al lado opuesto observé a Virginia que, totalmente despatarrada, lloraba a lágrima viva. Me limpié un poco, me acerqué como pude hasta ella ...
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