Mi vida atreves de mis violaciones parte 2
Fecha: 07/04/2018,
Categorías:
Confesiones
Autor: nena2221, Fuente: RelatosEróticos
... cada uno y las mismas veces se las había chupado, en definitiva era una muy buena puta.
Llego de nuevo el martes, tenía miedo y me dolía todo pero como siempre asistí a mi cita. Después de todo ¿como podría llegar a ser la mejor putita del mundo si flaqueaba con mi mejor cliente? me decía yo.
Entré en la cueva, me vestí escuche a alguien acercarse pero para mi sorpresa no era el pollo, era una especie de pepenador, me miro y me dijo.
Te estaba esperando. Asustado respondí ¿A mí? Si perra a ti a quien más pendeja, te he espiado y he visto como haces gozar a ese mocoso que te coge siempre, y ahora me vas a dar a mí ese mismo placer. Corrí pero apareció un segundo mendigo y me derribo de un golpe, ahí en el suelo me subió la falda me bajo las bragas y comenzó a metérmela, pero no se puso crema ni nada, no entraba y me dolía mientras el otro hombre ya había metido su polla hasta mi garganta, después de algunos intentos logró meterme esa polla hasta lo mas profundo de mi ser, Haaaa…!!! Exclame. ¿Verdad que te gusta putita? Me dijo el que me daba por el ano, a lo que respondí si si me gusta, cógemeeee .. maasss, así duro. Recordaba al pintor y me sentía tan bien con esas dos pollas jugosas y gruesas partiéndome mientras me decían puta, perra y mil obscenidades más, sentía como entraba hasta los huevos y salía para ...
... entrar de nuevo, terminó el primero y cambio lugar con el segundo este la tenía más grande y gruesa y sentía que me desgarraba, pero como buena puta apreté mi ano y me moví hasta exprimirlo por completo. Terminaron y se fueron dejándome solo, me sentí muy bien, esos dos hombres me habían violado como hace ya casi cuatro años lo había hecho ese pintor, por fin había sentido esa sensación de dolor, miedo placer que el pintor me había hecho sentir, sentirme humillado y al mismo tiempo alabado por ser tan rica perra.
Esa noche reflexione y descubrí algo, El pintor, el pollo y los pepenadores me habían violado por una razón todos ellos me habían visto vestido de puta metiéndome algo en el culo o chupándosela a alguien. Ahora sabía qué hacer, podía hacer que me violaran más fácilmente de lo que yo pensaba. El sexo consensual era bueno hasta entonces con mis amigos. Pero esos hombres cogiéndome violentamente, ¡era increíblemente delicioso! Ahora podía salir en busca de un violador que me hiciera sentir como la mejor puta del mundo.
Por cierto el pollo me cogió unas 2 ó 3 veces por semana hasta que cumplí yo los 16 y a él lo enviaron a vivir a Monterrey con su tía. Según mis cuentas el pollo eyaculo dentro de mi ano al menos unas 1300 veces. Y me violo una y otra vez haciéndome sentir una basura por cuatro años “Gracias Pollo”