Genesis de un desarreglo
Fecha: 16/04/2018,
Categorías:
Confesiones
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... conoció a un hombre que se ofreció a llevarla a su casa y en el camino acordaron ir a la playa y estando allá hacia mucho frio y se acurrucaron, después comenzaron los besos, las caricias, a quitarse las ropas luego ella se le monta y comienza a hacerlo muy excitada luego paran y él le chupa la vagina por un rato luego la penetro hasta que estuvo cerca, ella lo chupo al punto de tenerlo y después lo masturbó y él lo tubo en la cara de ella, pero esto es material de otra historia, cabe destacar que cuando ella lo hacia se excitaba mucho al punto que hacia de todo, hasta se le olvidaba que el condón existía, escuchando lo que me decía y viendo su vagina como la tiene me imagino que eso era común, el estar con tantos soldados. Eso si debo decir que a pesar de tener una vagina bien usada, esta bien buena y me gusta mucho aunque haya sido casi prostituta, digo casi por que nunca cobro, ahora soy yo quien disfruta de semejante chuchon y una buena perra, es solo para mi, por eso quiero donde pueda y cuando pueda metérselo, por lo sabrosa que la tiene.
Ya vino así, no se puede hacer más nada, se tiene que aceptar como es, lo único malo es que a pesar de haber sido como era no me quiere dar el culo, me lo dio un par de veces pero en el tiempo que tenemos juntos es poco muy poco, quizás si hubiera sabido como era antes de estar con ...
... ella, no me hubiera quedado con ella pero lo oculto hasta cuando estuvo segura de que yo estaba enamorado de ella y aceptarla así de todos modos, cuando lo hacemos me gusta mucho hablar del tema pero a ella no, el saber que mi mujer era así me excita mucho y me gusta mucho pero siento que ella no lo disfruta igual, aunque cuando me contaba de sus historias me confesaba que lo que hacia en esos momentos le gustaba y excitaba mucho y a mi me gustaba mucho cuando ella me lo decía, sentía que cuando lo hacíamos ambos lo disfrutábamos y el sexo era de mejor calidad, todo esto era sin querer recordar a nadie en particular sino hacer realce de lo que ella hace sentir a cualquiera y en este caso a mi, a ella le gustaba mucho que le dijera perra y le excitaba mucho pero al parecer se lo decía mucho que al final no le fue gustando. El saber que ella era así de fácil era una ventaja para esos hombre porque sabían que solo tenían que entablar una conversación y lo demás era cuestión de esperar el momento de salir de la disco y por lo menos tenían garantizado una noche de sexo con todo lo que una mujer puede hacer ó si lo pedían días de sexo como ocurrió en una ocasión que relataré después, con todos los elementos que he aportado en este relato saquen conclusiones y den sus opiniones sobre todo lo que conté en esta ocasión.
Atte. Wayo.