1. Flor –Abriendo una flor en primavera. Sexo en la oficina.


    Fecha: 29/04/2018, Categorías: Erotismo y Amor Autor: Nazareno Cruz, Fuente: CuentoRelatos

    ... aguantarme, demoré cuanto pude, ya en el límite de la resistencia le avisé, me pidió que dejara todo adentro de la conchita, quería sentirme todo en ella. Todo mi ser entraba contenido en el caliente semen que se volcaba en ella.
    
    Agotado por la pasión contenida, era el desahogo liberado, el deseo rebasando para expresar en líquida respuesta el amor naciente en mí. Era el amor como nunca antes manifestado a mujer alguna, un placer supremo que excedía la entrega sexual.
    
    Nos abrazamos, disfrutando la intimidad del contacto de la piel. No era todo perfecto, no pudo llegar al clímax. Explicó que habitualmente no llegaba, fingía siempre para no hacer sentir mal a su pareja, esta vez no mintió, fue auténtica.
    
    Comentó que la anorgasmia tendría su génesis en la formación ósea de su pelvis, que la hacía estrecha para la penetración (yo digo gloriosa), pero tal vez impedía llegar al orgasmo.
    
    Nos dormimos, enamorados, colmados de felicidad.
    
    Amanecimos abrazados, enlazada entre mis brazos y mis piernas, una mano en la ingle. Nos enfrentamos, besamos y tomé la teta mañanera, mamando de las dos con hambre insatisfecha hasta ponerla recaliente. Leve presión en la nuca, se miró en mis ojos y entendió el pedido, sin más bajó a la verga, tomó en sus manos.
    
    La boca se posó en la cabeza, lamió mientras registraba el efecto de sus caricias. Cuando creyó oportuno se la engulló. ¡Qué placer!
    
    El maravilloso masaje bucal me transportaba, durante él pregunté qué pasaba si salía. ...
    ... Sacó la boca para responder con naturalidad:
    
    —Me la tomo, es tuya.
    
    Aunque no se crea nunca había acabado en la boca, y menos pensado que se tragaran lo mío.
    
    Ahora su turno, la mano en su conchita, tan húmeda, los dedos haciendo la delicia de ella, en el clítoris por dentro, haciéndola disfrutar. Ahora de bruces en la cama, le estoy dando un tratamiento manual, con ambas manos haciéndola llegar al orgasmo, luego de prolongado toqueteo. En pocas ocasiones le saqué un orgasmo vaginal con la pija. Lo común es hacerlo de este modo, o junto con una chupada de concha, o bien mientras la estoy haciendo por la vagina, desde atrás, ella acaricie el clítoris como forma de llegar al clímax.
    
    El orden, casi siempre, primero hacerla llegar a ella y dejarla satisfecha, luego mi turno del disfrute de la delicia de una conchita tan estrecha. Tan delicioso es estar en ese lugar estrecho, tan placentero que no encuentro adjetivos para calificarla.
    
    Obtenido de ella la satisfacción de un prolongado orgasmo, y tras breve recuperación, retomó su dedicación a la verga que ansiosa esperaba nuevamente probar la caliente estrechez de su femineidad. Se la puse, entró más fácil ahora, después de unos momentos entrando y saliendo de ella, pidió que la colocara boca abajo. Se acomodó sobre una almohada y la enchufé desde atrás, coincidíamos en la postura que nos satisfacía por igual.
    
    Me la cogí con todo, con total profundidad, gozando del estrecho recinto, apretando la verga con deliciosa ...