¿Confias en mi? (2) - Relatos Eróticos

¿Confias en mi? (2)

... Pedro. "Jesús, cariño", gimió cuando repitió la acción varias veces. "¿hola?, ¿alguien?". El humor de Jennifer se había vuelto amargo, molesto de que nadie le estuviera hablando. "Lo siento, estaba haciendo algo. " Jimena soltó una risita antes de abandonar la polla de Pedro y volver al horno. "¡Qué demonios!" Susurró Pedro mientras ella se reía. "¿Qué tal una comida al aire libre?" Jimena luchó por mantenerse serena cuando Pedro le susurró palabras obscenas. Resistiendo el impulso de correrse, Pedro logró mantenerse fuerte mientras Jimena terminaba de hablar con su amiga. "Creo que una barbacoa sería genial", dijo, todavía sonriendo mientras Pedro esperaba. "Necesitamos conseguir algunas cosas primero, pero sí, trae a toda la pandilla". Jimena deslizó la bandeja de metal nuevamente dentro del horno refrigerado. "Excelente, nos vemos entonces. " Jimena terminó la llamada telefónica y se volvió hacia su novio. "¿Tienes problemas?", Preguntó, conteniendo su risa. "Ven, Súbete Aquí. "Ordenó Pedro con una gran sonrisa, señalando el paquete entre sus piernas. "Ooh sí, señor", sonrió, caminando hacia él y poniéndose de rodillas. Con una mano en su polla y la otra masajeando sus bolas, Jimena se mordió el labio seductoramente. "¿Debo hablar sucio también?", Cuestionó antes de tirar de su polla y lamer el líquido babeante que salía por la punta. "Joder, por favor sí", gimió antes de que su mano comenzara a moverse más rápido. "Aunque las bolas de Carlos eran mucho más grandes". ...

... Demasiado excitado para estar molesto, Pedro soltó una risa a medias para seguirle el juego a ella. "¿También era su polla más grande?" Pregunto Pedro, Jimena gimió otra vez mientras deslizaba su mejilla contra su polla. "Mucho más grande", bromeó con una sonrisa, presionando sus labios contra la punta de su pene. Pedro había comenzado a perder el aliento de emoción, ansioso por escucharla decir más. "¿y la de John?" Jimena se rió antes de colocar sus manos contra la parte de atrás de los muslos y bajar abriendo la boca, entrando centímetro a centímetro la polla de Pedro a través de su garganta. "Oh, mierda", gimió. Su lengua se colocó contra la parte inferior de su pene antes de que ella empujara más profundo, la nariz tocó el abdomen de predro y su cabeza comenzó a retroceder. Mientras su polla salía de su boca, largas hebras claras de saliva colgaban entre sus labios y su polla. "Oh Dios, Jimena, ¿qué te ha pasado?" Su voz estaba eufórica mientras sorbía el líquido en su boca y gemía. "La polla de John es más grande que la tuya también. " Finalmente respondió antes de colocar dos dedos en su boca y chuparlos. "No sé lo que te pasa, pero me encanta, bebé", gimió antes de mover su polla en su cara. "La polla de John se metió en mí", le guiñó un ojo antes de intentar metérsela nuevamente en la garganta. "¿Estaba bien?" Jimena se aferró de nuevo pero no se movió, girando su cabeza de lado a lado mientras su pene perforaba más en su garganta. Colocando su mano sobre su cabeza él ...