¿Confias en mi? (2) - Relatos Eróticos

¿Confias en mi? (2)

... Con su polla erecta debajo de la mesa, sonrió y se sintió seguro antes de responder. "Fuiste tú, John. Le diste un orgasmo a mi novia", Si actúo como si no me molestara, eventualmente me dejaran de molestar. Pensó pedro. Todos se rieron cuando John levantó los brazos en señal de victoria. "¿Todavía confías en ella?”, Preguntó la amiga de Jennifer, Susan con una sonrisa inocente, con los codos apoyados sobre la mesa. Pedro respondió sin dudarlo. "Absolutamente. Nada va a cambiar eso. " " Tal vez deberían seguir probándote”, dijo chris, el adolescente, mientras todos parecían estar de acuerdo con él. "¿Alguien tiene una toalla?", Samuel el negro pregunto, El grupo se rió, Jimena soltó una risita. "¿Realmente creen que va a funcionar, verdad?" Pedro dijo con una sonrisa, nada va a cambiar lo mucho que confío en ella, "Después de lo que hizo con John, estoy seguro que ninguno de ustedes puede superar eso ", dijo con confianza. "Jimena y yo nos conocimos cuando éramos niños, ¿está bien? Hemos estado juntos durante diez años, así que tus pequeños juegos no funcionarán conmigo. "Tomando un sorbo de su lata de refresco, todos miraron a su alrededor y sonrieron. " ¿Es eso un desafío? ", Dijo Carlos para encender el tema". Claro, tráela ", respondió Pedro con una sonrisa de confianza. Mientras tanto debajo de la mesa Jimena sostenía fuertemente la erección de Pedro, apretando y soltando cada tanto como mandando impulsos de bombeo hacia el cuerpo de Pedro, cuando terminaron de hablar, ...

... Jimena se levantó y caminó hacia el apartamento antes de volverse y sonreír. "Conseguiré una toalla", dijo antes de desaparecer por dentro. Cuando todos terminaron de comer, Pedro se sentó y frotó su erección. Sabía que Jimena disfrutaba burlándose de él, era algo que también había disfrutado. Usando su propia polla contra él, ella fue capaz de seguir presionándolo en estos juegos de "confianza". “tengo una propuesta, ¿Por qué no jugamos adentro?” Ella sonrió mientras todos se movían arrastrando los pies para dejar la mesa. Al acercarse a la puerta de atrás, John se paró frente a Pedro, bloqueándole el camino. "¿Por qué no haces otras hamburguesas?", Dijo John sonriéndole a Pedro, su cuello bronceado y su collar dorado todavía eran tan desagradables como siempre. "S-seguro hombre", dijo Pedro antes de darse la vuelta y caminar de regreso al asador. John siguió bloqueando la puerta trasera mientras observaba a Pedro sacar los filetes de su envoltorio antes de arrojarlos al fuego. Una vez que el fuego estuvo lo suficientemente alto, John sonrió y comenzó a preguntarle sobre su relación. "Entonces, ¿dejas que ella haga esto a menudo?" Pedro se rió entre dientes, "Oh sí, todo el tiempo", respondió sarcásticamente. "No te preocupes, hombre, es genial si te gusta ser un cornudo. Conseguir coño gratis de la novia de alguien es lo mejor" Respondió John. "¿Conoces a muchos . cornudos? " "Claro, muchos tipos están metidos en eso. " " Y simplemente te dejan . ¿hacerlo? "Pedro dejó caer ...