1. (4) Cuestión de bragas


    Fecha: 08/05/2018, Categorías: Microrelatos, Autor: Mister Neron, Fuente: CuentoRelatos

    ... continuaron.
    
    Adrián se confió y se agarró al culo de ella.
    
    -Oye, ¿cómo te llamas?
    
    -¿Yo? Adrián Martos.
    
    Adrián la abofeteó una nalga con esmero.
    
    -¡Auuu! ¡Mmmmm! Veo que sabes tratar a una chica, Adrián.
    
    -Eres maravillosa, joder…
    
    -¿Reconoces a esa mujer que está follando con Ana?
    
    -No…
    
    -¿La has visto la cara?
    
    -Que va. Está muy oscuro.
    
    -¿Y sabes de qué han hablado antes?
    
    -No sé. Estaba pendiente de Ana.
    
    Y automáticamente, Gabriela se bajó de encima.
    
    -¿Qué haces?
    
    -A la puta calle. Largo.
    
    -¿Cómo dices?
    
    -Si quieres te lo digo otra vez pero a base de hostias. Coges tu polla dura y a estudiar como un niño bueno.
    
    -Pero… no entiendo…
    
    -¿Te cojo de los pelos y te saco yo? ¡Fuera, hijo de puta!
    
    Adrián no tuvo otro remedio que hacer caso.
    
    -Ah, y me debes cinco euros. Has estado cinco minutos de más –puso Gabriela la mano.
    
    -Joder… -Adrián le dio el billete y Gabriela lo cogió con satisfacción.
    
    -Dinero fácil. Ahora vete y cierra la puerta al salir, que hace corriente fuera y se me hiela el potorro.
    
    -Puta asquerosa… -susurró Adrián.
    
    -¿Qué coño has dicho?
    
    -Nada, nada.
    
    -Ah, ...
    ... creía, porque puedes salir de esta habitación con una dentellada en la polla. No sería la primera vez. A tomar por culo, novato.
    
    Y Adrián se marchó humillado y muy afectado.
    
    Gabriela cerró la puerta con llave y ambientó un poco la habitación con música chillout y aire fresco en el aire-acondicionado.
    
    Ana y la concejala se enzarzaban en un combate de besos, bofetadas y revolcones.
    
    -Gabri, ya sabes –pudo hablar Ana pese a los embites de la concejala.
    
    Gabriela comprendió y encendió la lamparilla de su mesita. Luego cogió el móvil y se puso a grabar en vídeo el coito lésbico entre Ana y la concejala del ayuntamiento.
    
    -Mmmmm… -sonreía Gabriela-. Ya tenemos las dos firmas que nos quedan.
    
    Ana se agarró al cabecero de la cama y la concejala se encajó con las piernas para realizar las tijeras.
    
    -Isa, saluda al gestor tributario Raúl González y al interventor municipal José Luis Belgrado. Esto va para ellos –reía Gabriela.
    
    La concejala respondió sacando la lengua obscenamente.
    
    -Con eso basta –rió Gabriela con gozo-. Bueno, Isa, hay que correrse a lo bestia. Todo depende de esta follada. Hay que poner coño y alma yeahhhhh… 
«123»