Masaje erótico con mi mujer y una profesional
Fecha: 09/05/2018,
Categorías:
Microrelatos,
Autor: matoarg, Fuente: CuentoRelatos
... pechos y del otro lado manoseando los de Azul, era soñado, estaba tocando cuatro pechos (todos para mi) y no cualquier pechos, eran perfectos, grandes, a la medida de mi mano y mi boca, donde los chuparía con mucho placer.
Varias veces Azul me preguntaba si estaba disfrutando lo que me hacían ambas, yo a esa altura lo único que quería era cogerme alguna, darle matraca hasta acabar como nunca. Mientras le decía que estaba gozando mucho manoseaba su culo, por debajo de su minifalda, y ella me besaba cosa de tener más placer, mientras no dejaban de pajearme entre ambas.
En un momento le hago una señal como de un beso a mi amada esposa y ella interpreto que yo le pedía unos besitos en mi pito, y casi tímidamente le pide permiso a su competencia, la cual le dice que sea libre de hacerme gozar. En eso Azul se acerca a mi poronga y se la introduce en casi su totalidad en boca, subiendo y bajando, para pasar toda su lengua por mi cabeza, mientras Cinti me acaricia mis huevos y me permite tocar sus pechos y piernas trabajadas. Estaba en un éxtasis total, difícilmente podría cumplir de no acabar, es más sabia que no iba aguantar mucho antes semejante placer y estímulos.
Realmente estaba en una de las mejores semanas sexuales de mi vida, primero un trio con otro hombre y mi esposa, dos días antes y ahora gozando con dos hermosas mujeres, que se complementaban a la perfección para darme un placer único, nunca sentido.
Nuevamente tuve que pedir que se detengan porque estaba ...
... cerca de terminar, a lo cual Azul hace una pausa, pero la profesional tenía un as en la manga, saco no sé de donde un jengibre (totalmente pelado y con tajos) y me lo empezó a pasar por la cabeza de la poronga, a su vez paso el jugo de este por su mano, se lo acerco a su boca y lo mordió, agarro mi pija y empezó a masturbarme hasta que me la empezó a chupar, lo que ya de por si de solo verlo era muy excitante, no se imaginan lo que produce el jengibre, una sensación de calor insoportable y excitante, sentía que mi chota estaba por explotar, en eso Azul pone su mano en mis huevos, ante semejante combo no aguante más y acaba como nunca, la leche saltaba por todos lados, hacía mucho que no acaba tanta cantidad, al verme eyacular, Azul se acerca y me da el ultimo regalito y me empieza a limpiar la pija con su boca, chupándola y dejándola totalmente limpia.
¡¡¡QUE NOCHEEE!!! si bien no garche con ninguna de las dos en ese momento, fue una experiencia única y excitante, una jornada muy diferente a lo que estaba acostumbrado, mucha adrenalina, por primera vez mi mujer me había compartido a medias con otra mujer y ante el miedo de ella de no poder tolerarlo, se sorprendió al sentir mucho placer por ver que yo tenga gozara y tuviera tanto placer con otra mujer que no sea ella.
Claramente al llegar a casa, la agarre y la cogí bien cogida, estuvimos unos 40 minutos a toda máquina, dándole y dándole, a tal punto que ella acabo en tres ocasiones, ella tuvo su recompensa por darme ...