1. Sólo un par de tragos


    Fecha: 09/05/2018, Categorías: Confesiones Autor: IMen4You, Fuente: CuentoRelatos

    Se llega nuevamente un fin de semana, mucho estrés por el exceso de trabajo durante los últimos días.
    
    Me dirijo a mi casa manejando, cansado con el deseo de solo llegar y dormir hasta más no poder.
    
    Al llegar a casa noté a mi vecina Mayra discutir con su pareja, hice caso omiso y me dispuse a estacionar mi auto en mi cochera. Escuche algunos gritos a lo cual su esposo se subió a su auto y se marchó enojado.
    
    Me acerqué un poco y con algo de pena le pregunté si todo estaba bien.
    
    Respondió que sí, afirmando con su cabeza y apenada por lo que noté. Le dije que no se preocupara, que más tarde se le bajaría el enojo a su esposo, y que lo mejor de todo, las reconciliaciones siempre son para bien.
    
    Sonrió y solo respondió: “Ojalá dios te oiga” respondí solamente con una sonrisa.
    
    Me preguntó cómo me fue en el trabajo. Respondí que tuve una semana muy agitada, exceso de papeleos y como siempre, terminando muerto con ganas de un par de tragos y dormir hasta no poder más.
    
    Al oír mi respuesta dijo: “Mírate, quien te viera. Seguro te haz de echar tus buenos tragos”
    
    Le respondí que no suelo tomar, pero de vez en cuando darle un poco de alcohol al cuerpo, te relaja.
    
    Sonrió y me dijo “tengo un poco de alcohol ya empezado, si quieres compartimos un par de copas”.
    
    “Sería una grandiosa idea vecina, pero no quiero tener problemas con tu marido” respondí.
    
    - No te preocupes, no creo llegue en un buen rato. Cuando se molesta se va a tomar y regresa solo a ...
    ... dormir.
    
    “Siendo así, creo podríamos tomar un par de copas, deja ir a ponerme algo más cómodo y regreso si gustas”
    
    - Si sientes incomodidad en mi casa, puedo llevarla a la tuya para que estés tranquilo.
    
    “No te preocupes, voy rápido y regreso”
    
    - Esta bien (Sonriendo y cerrándome el ojo)
    
    No lo tome de forma tan perversa la invitación, a lo cual fui a mi casa a dejar mis cosas de trabajo y cambiarme de ropa.
    
    Pasaron 5 minutos quizás cuando escuche tocaron la puerta trasera de mi casa.
    
    Acudí para saber quién tocaba a mi puerta, mire por el picaporte y era mi vecina. Me sorprendí pero no le tomé tanta importancia, abrí la puerta y dijo, “Para que no te eches para atrás, me traje la botella hasta tu casa” sonreí y le dije pasa entonces.
    
    Le dije se pusiera cómoda, que buscara en la cocina un par de copas en lo que cambiaba de ropa.
    
    Fui a mi cuarto que estaba no lejos de la cocina, busque un atuendo ligero para estar más cómodo. Al comenzar a desvestirme escuche un leve ruido, no hice caso y seguí vistiéndome. Al terminar de cambiarme avance a la puerta y sorprendí a mi vecina tras ella, le pregunte:
    
    “¿Perdida?”
    
    - No, disculpa estaba buscando el baño (Algo sonrojada)
    
    “Está al fondo” le conteste con una sonrisa.
    
    Fue caminando hacia él mientras yo me fui a la cocina, serví mi copa y la de ella. Al minuto llego y se sentó a lado mío.
    
    Comenzamos a charlar y a tomar poco a poco. Me preguntaba sobre mi vida, y cosas de no tan importancia. El reloj avanzaba y la ...
«1234»