Atrapado entre gigantas - Relatos Eróticos

Atrapado entre gigantas

... daba vueltas mire a mi alrededor y vi una gran barda blanca con rojo, además el suelo donde estaba era café claro y al tocarlo acolchonado, así que no era el suelo donde creí estar. Y lo siguiente que vi me hizo deducir mi posición. Vi 6 pares de hermosas piernas, como de 4000 metros de alto, acercándose a donde yo estaba y de repente me vi rodeado por ellas, y al elevar mas mi vista vi que era mi prima Carmen y sus amigas, entonces comprendí que me había hecho mas pequeño, de 1 centímetro de alto y la mesa donde estaba era la asignada para mi prima y su familia. Por lo que deduje que lo volví a lograr. A lo lejos oía el bullicio de más gente y comprendí que los demás familiares estaban llegando a la reunión familiar anual. Y entonces yo desee volver a mi tamaño normal, no importando lo que fueran a pensar todos mis familiares de mi, ni que espantara a mi prima y sus amigas, así que lo desee y espere a que volviera a mi tamaño, pero no paso nada, lo intente de nuevo y de nuevo nada, así que pensé que mi primer pensamiento fue tan fuerte que nada paso y que así pasaría mucho tiempo antes de volver a la normalidad si es que algún día volvía. De repente el mundo se empezó a mover con fuerza, como si un terremoto sacudiera la ciudad, pero era solamente que estaban moviendo la silla donde yo estaba para sentarse, y vi con terror y cierta emoción como esas hermosas gigantes decidían como iban a sentarse. Y vi que Antonieta se iba a sentar justo sobre mi, yo desesperado corrí para ...

... una orilla, y justo en el momento que llegue al borde de la silla ella dejo caer toda su humanidad en la silla, sacando el aire del centro de la silla y pasándolo a las orillas y yo salí volando por los aires, cayendo sobre su pierna izquierda, y ahí pude apreciar su belleza desde un punto de vista diferente otra vez. Antonieta es una mujer bella con un cuerpo de modelo, pues es maestra de aeróbics, tiene el trasero mas grande que yo haya visto en una mujer, cabello negro lacio a la altura de los hombros, y al estar ahí sobre su muslo, lo quería acariciar, y quedarme ahí todo el tiempo, pero sabia que necesitaba llegar con Carmen, ya que era la única que podía ayudarme a recuperar mi tamaño original ya que ella también savia de ciencias. Estaba analizando mis opciones para llegar a Carmen, cuando repentinamente sentí una gran masa que tiraron sobre mi espalda, y era que Antonieta había cruzado sus piernas, la derecha sobre la izquierda donde yo me encontraba por lo que quede atrapado entre sus majestuosos muslos, sentía como si mis costillas estuvieran a punto de romperse, y mas y mas terror sentí al ver a una gigantesca mano empezando a meterse entre las piernas, ahí pude ver una pequeñísima oportunidad para escapar de ahí. Vi su anillo de graduación y pensé en sujetarme de el para cuando ella quite la mano de ahí escapar de mi prisión de carne. Pero además tenia que hacer algo mas para que separara sus piernas, por lo que pensé en morder su dedo, así quizá ella piense que es ...