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Otra caminata nocturna por calles oscuras
Fecha: 22/05/2018, Categorías: Anal Sexo con Maduras Hardcore, Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... ver que yo reaccionaba y trataba de resistirme a la penetración de mi entrada trasera.Su verga era gruesa y me producía gran dolor pero no tenía más voluntad para gritar, estaba con mi cara contra el suelo y con cada embestida el frío cemento raspaba mis pezones y mejillas. Sentía ardor, pero tampoco me importaba, estaba casi entregada.Mientras mantuve la consciencia, el tipo acabó dos veces dentro de mi culo, llenándomelo de semen hirviente. Luego perdí el contacto con la realidad durante un buen rato, quedando desmayada sobre el piso húmedo y frío.Al recobrarme, sentí que mi culo estaba bastante abierto, dolorido y me ardía mucho. De repente el tipo se inclinó junto a mí, susurrando al oído que me merecía todo esto por puta. Sentí entonces más dolor en mi culo, como si me hubiesen clavado algo.Mi atacante movió sus manos, haciéndome aullar de dolor, con ese objeto frío y duro enterrado en mi recto. Lo movió entrando y saliendo, hasta que finalmente se cansó y lo arrojó a un costado. Era algo metálico, por el ruido que hizo al chocar contra el piso.Con ello, el tipo finalmente desapareció del lugar. Yo me quedé inmóvil, como me encontraba, boca abajo tratando de recuperar el movimiento de mi cuerpo entumecido. Estaba en una especie de trance de pura paz, no sentía nada, el cansancio superaba todo.Al levantarme pude ver por una ventana que ya estaba clareando el día.Busqué mi tanga pero no pude encontrarla por ningún lado. Al ponerme las calzas sentí humedad en mi vagina y entonces encontré que tenía semen dentro de ella…Evidentemente estuve desmayada durante un buen rato, ya que no recordaba que el tipo me hubiera cogido por la concha…Regresé hasta mi auto estacionado; caminando con cierta dificultad por mi culo roto.Al llegar a casa no tuve ni ánimos para bañarme; caí rendida sobre mi cama hasta el mediodía. Sentía que ese hijo de puta había abusado a su antojo de todos mis orificios, pero la situación realmente me había calentado… y mucho...