Recuerdos - Relatos Eróticos

Recuerdos

Hace algunos ayeres cuando mi unico hijo oficial estaba en plena pubertad, a sus doce años era igual o peor de inquieto que su padre, me tenia mucha confianza, me preguntaba de todo una tarde me pregunto hijo -papa es normal que quiera tanto ver porno en el internet- yo -bueno, a tu edad es natural, tienes curiosidad, tus hormonas dominan, mientras sepas que no es la realidad, no habra problema, la mayoria son actuados- y le explique lo mejor que pude paso unos minutos despues continuo hijo -papa y . masturbarse es malo? . como es normal?- pense un poco y respondi yo -no es malo, siempre que no sea en exceso, digo a cada hora o minuto- dije en tono de broma yo -a que llamas normal? normal pues es tocarse el miembro, jalando despacio, suave o rapido- hijo -,me muestras como se hace?- trague saliva y me miro con insistencia, lo bueno es que estabamos solos yo -bueno. pero de esto ni una palabra a nadie- hijo -prometido- tome un desodorante largo y sujetandolo le mostre como deberia hjcerlo con su pene, mientras el miraba hijo -papa asi no. como voy a aprender. eso no es igual a un pene- trague saliva nuevamente y lo mire, despues caminamos hasta su recamara, ahi se sento esperando, con nervios y mucho morbo, me baje las ropas de la cintura para abajo, liberando mi pene, lentamente comence a tocarme, con tanto morbo por la situacion, casi al instante tuve una ereccion, comence a jalarmela despacio, suave, frotando el glande, bajo su intensa mirada, sus mejillas se sonrojaban ...

... hijo -es que . yo vi en internet otra forma- yo -enseñame- dije sin pensar tembloroso se quito igual que yo las ropas, solo que ya tenia una completa ereccion, se sento en la cama, se recosto boca arriba colocando unas almohadas, abrio casi completas las piernas, para luego comenzar a masturbarse, lo que no esperaba es que mientras una mano jalaba su pene, con la otra usando sus dedos frotaba su ano, sus mejillas rosadas de color, su mirada vidriosa, se notaba el placer que sentia, su respiracion se agito mas y mas, mirando como me masturbaba cerca de el, lento sin previo aviso, su cara se acerco a mi ereccion, confieso que no hice nada por evitarlo, al contrario, quite mis manos y empuje mis caderas, poniendo mi glande a su alcance, me miro como pidiendo permiso, cuando dio su primera chupada, senti que temblo el cuarto completo, su lengua repitio una y otra vez la caricia, lamiendo todo lo largo, probando mis jugos, hasta que sus labios atraparon mi verga, dandole una larga chupada que me hizo volar de placer, despues de sentir como la chupaba, mi mano bajo sola y empujo su cabeza marcandole el ritmo, el placer que sentia era bestial, me estaba cogiendo la boca de mi adorado hijo, mientras el no paraba de chupar escuchaba su saliva, sentia su lengua, dandome masaje en el glande, en el troinco, mientras lo miraba masturbarse como podia, para ayudarle, me acomode a su lado, montandome, asi mas comodo, sus manos jugaban su verga y culo, en el colmo de la morbosidad escuche un ...