1. El castigo del mujeriego


    Fecha: 30/10/2021, Categorías: No Consentido Autor: Jascer, Fuente: CuentoRelatos

    ... desnudo sobre ella portándose como un espléndido garañón hasta volverla loca de lujuria.
    
    Mike trató de apartar el pie, pero fue imposible por las ataduras. -¿Por qué estoy así? -reiteró su anterior pregunta. Adriana se levantó y le dio una nalgada, con fuerza. Mike tomado por sorpresa soltó un grito y luego se retorció mientras la piel bajo el golpe se le tornaba roja. -Serás castigado. -le dijo la chica hablando por primera vez.
    
    Mike reconoció a la bella morena de ojos verdes y de larga cabellera oscura con la que pasara buenos momentos de sexo casual. Pudiera haber sido su novia y hasta su esposa, porque era perfecta en muchos sentidos, pero como las demás salió de su vida porque un día no la buscó más ni la recibió cuando lo buscó. -Oh, Adriana... -exclamó con una risa nerviosa. -Eres tú...
    
    Adriana lo miró con desprecio a pesar de que no podía verla por la venda que le cubría los ojos. -Sí, soy yo... -le dijo con voz fría.
    
    Mike titubeó, sin saber que decir y luego habló -Menos mal que eres tú... dijo con voz apenas perceptible. -¿Cómo? -preguntó Adriana fingiendo no haber oído. Mike se sonrojó. -Qué me alegra que seas tú... Adriana frunció el ceño -¿Por qué? -preguntó con desdén. Mike se sonrojó aún más y titubeó antes de hablar. -Pensé que serías un secuestrador... Adriana sonrió con una sonora carcajada y después se sentó a su lado para acercarle la cara al oído y decirle con un susurro perverso: -Pero si te he ...
    ... secuestrado, bombón...
    
    Adriana, no fuiste tú, fui yo... -exclamó Mike implorante con los ojos húmedos -...fui yo el del problema: tú no tuviste la culpa de nuestra separación. Yo fallé... Adriana lo miró con desprecio. -Pero si no te lo estoy contradiciendo, bombón... -le dijo con ironía. -Por supuesto que fuiste tú el repugnante cerdo que jugó conmigo... -agregó sin dar manifestaciones de estar molesta. Luego sonrió -...pero no hay problema, estamos a mano porque ahora seré yo la que juegue y me divierta contigo...
    
    Mike se retorció adolorido, con los ojos llorosos, la cara roja y las arterias del cuello hinchadas, todavía con las manos atadas detrás de la espalda y los pies atados por los tobillos, pero ahora boca arriba, con la venda aún también sobre los ojos- ¡Basta, por favor! -suplicó entre sollozos con el pene rojo y lastimado entre los dedos de Adriana, que seguía masturbándolo aún mucho después de que eyaculara, no resultándole ya para nada placentera la estimulación que en un principio, a pesar de su condición ante la chica, había disfrutado bastante. El chorro abundante de esperma blanco que emergiera de su polla erecta cuando encogiera las piernas y curvara los dedos de los pies ante los intensos masajes sexuales que le prodigaba su ex lo confirmaba. Pero ahora el roce de sus dedos por su polla exhausta era una auténtica tortura. Mike no tuvo inconvenientes para reconocerlo: Adriana lo estaba torturando como venganza.
    
    FIN 
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