1. Dos sissys de paseo (Tercera y ultima parte)


    Fecha: 14/11/2021, Categorías: Transexuales Autor: sissy coqueta, Fuente: CuentoRelatos

    ... juguetes que ya Susy había lavado, el los repartió de forma igual para cada una, debo confesar que me puse muy feliz cuando recibí el dildo doble de perrita pues lo considere como un premio, cuando termino nos indicó que antes de almorzar nos iba a castigar, así que buscamos las sogas y él nos ató juntas a una viga con los brazos arriba, nos puso muy juntas y con la soga ato nuestras cinturas y piernas también, subió las faldas de traje de sirvienta y nos comenzó a dar nalgadas primero, luego con una fusta, una látigo y un cinturón, yo conté más de 200 nalgadas y para cuando termino no solo me había mojado toda en las tangas, también tenía mis pantimedias en las rodillas y a Susy con su colita en mi culito mientras recibía mas nalgadas gimiendo y dando las gracias como una sumisa mientras llenaba mi culito con su lechita. Después de que él nos desatara nos ordenó que sirviéramos el almuerzo así mojaditas, las dos lo obedecimos y rápidamente estábamos de rodillas una a cada lado de su silla comiendo de nuestras cocas como dos perritas obedientes.
    
    Cuando terminamos de comer siguiendo sus instrucciones organizamos la cocina, luego cada una comenzó a organizar sus cosas, primero nos dejó ir a las maletas a buscar pantis limpios, entonces nos dijo que quería ver como empacábamos las maletas, así que nos ordenó sacar todo y organizarlo afuera, luego fuimos empacando en el orden que nos decía y mientras nos hacía mostrarle algunas prendas, primero empacamos las pantis y luego ...
    ... toda la ropa interior, las dos teníamos todavía varias pantis y sostenes nuevos, luego siguieron los juguetes eróticos que nos había regalado, las pijamitas y los vestidos fueron lo último que pudimos empacar, pues ambas notamos la maleta llena, pues eran iguales y solo se diferenciaban por las placas con nuestros nombres de nena.
    
    Nos miramos asustadas imaginado que debíamos llevar lo que faltaba en bolsas, pues aun nuestros trajes de sirvienta, zapatos, maquillaje entre otras cosas como la sogas y collares de perrita que habíamos usado y que él nos había regalado seguían sobre sobre las sillas de la sala. Entre risas él nos explicó que con los juguetes y las cosas que él había sacado de su maleta era normal que ya no tuviéramos espacio, entonces nos tranquilizó diciendo que su maleta era para una de las dos mientras nos pedía que le lleváramos la cuarta maleta, esa que había estado intacta durante todo el tiempo, fui por ella y note que estaba llena, pesaba un poco por lo que preferí usar las ruedas para ponerla al lado del señor.
    
    El acostó la maleta y mientras nos decía que era su mejor fin de semana en la vida y que éramos las putas más femeninas y sumisas que había conocido fue abriéndola, cuando termino nos dijo que como regalo de despedida nos había comprado un vestido de quince para cada una con ropita interior y accesorios, también había empacado algo de dinero para pagarnos por ser unas buenas sirvientas y algunas joyas femeninas para celebrar que ya éramos todas ...