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El mejor amigo de mi marido me llena la boca de semen
Fecha: 28/11/2021, Categorías: Sexo Oral Autor: subtitulados, Fuente: CuentoRelatos
J: Ah, así, ¡que rico! L: ¡Mmm! ¿Te gusta? J: ¡Si, Lety, sigue! L: ¡Me encanta tu rica verga! J: ¡Cómetela, agh! Jonathan, es el mejor amigo de Luis y porque terminé dándole una rica chupada en su carro, muy simple, para pagarle con lo mismo a Luis. Todo iba muy bien, el excelente ambiente, amantes, los encuentros grupales, el sexo y mi vida familiar estaban en lo mejor, hasta que vi su celular. Revisándolo encontré chats, con mis amigas, Lucero, Paula, Bere, Paty, ¡el muy maldito les mandaba fotos de su verga y las muy traidoras le correspondían con fotos provocadoras y videos tocándose! Me afectó la traición al cuerdo, con todas menos con mis amistades, le reclamé y él sin decir más me insinuó que hiciera lo mismo, eso me enfadó como no tienen idea. Una tarde me dirigía a casa de mis padres, aun me encontraba molesta, justo cuando tomaría un taxi me tocaron un claxon, al mirar estaba Jonathan. J: Hola, ¿cómo estas Lety? L: Bien ¿y tú? J: Bien, ¿oye necesitas un aventón? L: Jajá, ¡voy a casa de mis padres! J: Déjame acercarte ahí, ¡igual el taxi es menos! L: Bueno, ¡está bien! Subí a su carro, en el pasado Jonathan me cortejo, pero yo me decidí por Luis. Él es un tipo moreno, de ojos color claro, buen físico y se rumoraba que tenía una gran polla, no podía negar sentirme atraída por él. J: ¿Y cómo han estado? Hace meses no veo a Luis. L: Pues más o menos, ¡ando enojada con tu amigo! J: ¡Cómo crees! ¿ahora que te ...
... hizo? L: ¡Rompió un acuerdo que teníamos! J: Ese hermano, jajá, ya no te enojes con él, esta lurias, ¡pero es buena bestia! L: ¡Lo defiendes por ser tu amigo! J: Jajá, ¡es mi deber! Jonathan tenía una actitud que me agradaba, el muy fresco y seguro de sí mismo, entablaba todo tipo de conversación, yo estaba pasándola bien, por un momento olvide que era amigo de Luis y me sentía atraída sexualmente por él. J: Bueno, llegamos a su destino. L: Ay, ¡eres un amor! J: Perdón mi atrevimiento, pero espero aceptes tomar un café conmigo algún día. L: Jajá, ¡pero soy la esposa de tu amigo! J: Lo sé, solo es para convivir, me la pasé muy bien en el trayecto, tienes una sonrisa envidiable y además a veces es bueno que te vean con una escultural mujer como tú. Lo miré fijamente, su cara mostraba sinceridad, analicé las cosas y tomé una decisión que ni él se esperaba. L: Sabes, creo que acepto tu invitación, ¡pero sería hoy! J: ¿No vas a ir con tus padres? L: ¡Nene, ahí estaré, jajá! J: Jajá, ok, ya entiendo, bueno, sube, ¡te llevaré a un buen lugar! L: Sabes, cerca de la avenida grande hay un mirador donde se ve la ciudad, vamos ahí, compremos algo para amenizar la charla. J: ¡Guau! Está bien, ¡vamos! Estábamos cerca del Ajusco y la calle donde le dije era donde Luis y yo teníamos sexos en el pasado, no sé por qué, pero me calentó la idea de ir con él a ese lugar. J: ¡Bonito lugar! L: Aquí venía con tu amigo. J: ¿En serio? L: ...