1. Descubriendo la puta que hay en ti


    Fecha: 05/01/2022, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: femerba, Fuente: CuentoRelatos

    ... tres días, habían compartido con Oscar, su compañero de trabajo, pero, aparte de paseos, comidas y conversación, las cosas no habían ido más allá.
    
    En algún momento acudimos a un concierto, un viernes en la noche. Marta, sin prevención alguna, acudió al evento con Oscar, quien al parecer ya era su compañero de reemplazo cuando su marido Antonio se encontraba ausente, así que ya nos habíamos acostumbrado a su constante y frecuente presencia. El tipo, para qué, era apuesto y bien coqueto, de modo que hacía pareja perfecta con la espontaneidad y desparpajo de Marta. Pero, según me contó mi esposa, él no había dado señas de ir más allá y ella, aunque lo deseaba, no sabía cómo proceder, porque le daba miedo actuar y, por impulsiva, dañar esa bonita amistad y que él pudiera pensar mal de ella.
    
    Mi esposa, tratando de ser imparcial y coherente, y aconsejar bien a su amiga, si así pudiera decirse, le había preguntado a Marta, qué era lo que realmente quería dar a entender con ser impulsiva y dañar la bonita amistad. Pues que él se atreva a tener algo conmigo cuando estemos juntos, había respondido ella, porque, si eso pasa, yo le sabré responder. Y a qué te refieres con que él se atreva a tener algo contigo. Pues, ya tú sabes, le confesó, que quiera hacer el amor conmigo. Y tú, ¿tienes ganas? le había preguntado mi esposa, ¿lo quieres hacer? Sí, le había respondido ella. ¿Y qué te ha impedido hacerlo? Le preguntó. Me da miedo, fue su respuesta.
    
    Bueno, le preguntaba yo a mi ...
    ... esposa, y ¿cómo crees que podrías ayudarla? No sé, de pronto acompañándola en alguna actividad, para que se sienta confiada y más segura. Pero, reflexionaba yo, ¿qué actividad sería esa? La verdad, decía mi esposa, ella cree que al tener sexo con alguien que no sea su marido estaría incurriendo en algo indebido y no quisiera cargar con eso. Jajaja, me reí. ¿Y cómo venciste tú eso, acaso no pensabas lo mismo? Sí. Aventurándome para verificar que esa idea no era tan cierta, pero, la verdad, conté con tu apoyo para que eso sucediera. Una cosa es el placer físico como parte de una experiencia y otra diferente el proyecto de vida, la profesión, los objetivos propios y en conjunto, la familia. Son muchas cosas, la verdad. Quizá la variedad en el disfrute sexual es tan solo un caprichito, que hay que vivirlo para poderlo comprender.
    
    Seguramente tendrás que hablar con ella, largo y tendido, más allá de lo meramente profesional, de manera que se construya confianza y una sana compinchería. Eso, había dicho, mi esposa, creo que ya está; pero tal vez no lo hemos llevado más allá de algunas travesuras. Y si el miedo de ella es aventurarse, ¿porque no le ofreces recorrer el mismo camino que tú recorriste? ¿O es que ya te olvidaste de cómo empezó todo? ¡No sé! Tendría que hablar con ella y ver cómo reacciona. Veremos qué pasa y te contaré.
    
    El tiempo fue pasando y aparentemente nada sucedía. Las salidas con Marta seguían siendo frecuentes, pero habían tomado un tinte familiar. Salíamos ...
«12...456...18»