Cena de trabajo
Fecha: 20/01/2022,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... propios fluídos. No pude evitar acariciarlo antes de hundir mi cabeza entre sus piernas y empezar a regalarle una comida como dios manda. Ella se arqueó cuando su clítoris quedó atrapado entre mis labios, y cuando empecé a jugar con él con mi lengua, para luego ir recorriendo toda su raja con ésta, dejando que penetrara un poquito en ella, para volver a su clítoris y volver a succionarlo. Al tiempo, mi dedo fue bajando hasta llegar a la entrada de su culo, y cuál fue mi sorpresa cuando tras dos caricias en un culo que se veía bien dilatado, sin apenas intención, sin buscarlo, mi dedo se introdujo en ella hasta la mitad a la vez que ella soltaba un respingo y volvía a arquearse. Con ese arqueo, mi dedo entró un poco más, y empecé a follarle el culo con mi dedo al tiempo que seguía comiéndole el coño.
Ella acariciaba mi cabeza y me dirigía, buscando sus puntos de placer, sobretodo cuando dejé que un segundo dedo entrara en su culo y empecé a follarle con ambos. Isa gemía y cada vez se movía más, hasta que de nuevo noté cómo su cuerpo se tensaba, como su respiración se cortaba… y esta vez clavé más mis dedos en su culo y aceleré mi comida de coño, hasta notar cómo volvía a correrse y notar como ese manjar entraba en mi boca. Delicioso.
Dejé que se relajara y sólo cuando su respiración volvió a la normalidad le miré y la ví con una gran sonrisa, saqué mis dedos de su culo y subí a besarla de nuevo, compartiendo con ella sus propios líquidos y notando como mi polla ...
... rozaba contra su coño, empapándose.
Sin previo aviso noté como su mano cogía mi polla y la dirigió a su entrada, donde de nuevo sin dificultad volvió a introducirse, para poco a poco, sin prisa, pero profundo, empecé a follarla de nuevo mientras la besaba, besaba su cuello, y compartía la mutua respiración en nuestras bocas.
La follé lentamente, sin prisa, disfrutando del momento, hasta que noté que estaba cerca de mi orgasmo, así que la saqué. Isa dedujo ra´pidamente porque dejaba de follarla, así que ayudó a que la sacara y se empezó a colocar para que acercara mi miembro a su boca.
Cuando llegó, no dudó, y sin usar las manos se la metió entera en la boca, jugando con su lengua dentro de ella, y empezó a follarme con su boca a la vez que sus dedos jugaban y urgaban en mi ano… qué gozada
Mentiría si dijera cuánto duró la mamada. Empecé a sentir que me corría, y le avisé, pero ella no separó su boca de mi polla ni abrió sus labios, así que empecé a descargar mi leche en ella. Cuando paré, siguió chupando un poco más, mientras notaba mi propio semen en su boca rodeando mi polla.
Finalmente se separó, y aunque tragó una parte, aún con restos en su boca y labios buscó los míos para besarme de nuevo, mezclando mi propio semen con nuestras salivas, tragando ambos lo que quedaba en su boca.
Tras el beso blanco volvió a descender, limpió con su boca lo que quedaba de leche en mi polla y me sonrió.
Ambos sabíamos que ya no habría más, que ya habíamos hecho lo que ...