Una relación con mi prima de lo más ardiente e inolvidable
Fecha: 03/06/2018,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: [email protected], Fuente: CuentoRelatos
Como "buen" universitario me encontraba en verano un día cualquiera estudiando en mi casa por la mañana, aquel día lo pasaría tranquilamente yo sólo, al menos eso creía y gracias a dios que no fue así.
Mis padres se fueron a pasar el día a casa de unos amigos en plan de comida con los viejos amigos, estas reuniones para mi suponían que podría disponer de la casa a mis anchas y me dejarían estudiar.
Estos planes se empezaron a fastidiar a eso de las 11:00 a.m. cuando recibo un sms de un amigo, le contesto diciéndole el plan que tenía, bueno pues para eso de las 11:45 a.m. ya tenía la visita de unos amigos/as dispuestos a que le cocinara uno de mis suculentos platos de pasta y así fue, para las 14:00 ya estaba mi casa llena de amigos comiendo la verdad no me desagrado la idea.
Para eso de las 15:30 se fueron y recibo un sms de mi prima!! Estaba enfadada por que se enteró, no sé cómo, que los había invitado y no a ella, al final le dije que se viniera para hablar y solucionar de alguna manera la papeleta.
15:45 llega mi prima toda enfadada, al final después de hablar e invitarle a un plato de arroz con leche se calma.
Empezamos a reírnos y cada vez la conversación se vuelve más caliente, hasta que empieza a chuparse un dedo mojado en la leche, al ver que mis ojos se abren como platos no se le ocurre otra cosa que poner una cucharada del postre en uno de sus hombros y me invita a que me lo coma, yo sin pensarlo le doy un buen chupetón y empiezo a besarle en ...
... cuello, mientras con mis manos le desabrocho los pantalones para acariciarle su conejo, nos levantamos del sofá y empezamos a despelotarnos como posesos, me empuja y se va corriendo semidesnuda por el pasillo hacia mi habitación.
Aquella imagen no se me borrará nunca (no creo que deba volver a describirla ya que creo que lo he hecho en otros relatos).
Llego detrás de ella a mi habitación, ella se tira a la cama y yo lo mismo nos quitamos la poca ropa que nos quedaba...
Empezamos a comernos la boca y su lengua me vuelve loco, dios como besa la condenada.
Le agarro sus brazos y mi boca va bajando por su cuerpo hasta llegar a sus pechos que como, no los beso, juego con sus pezones y los mordisqueo, siento que eso le excita, salgo corriendo para el salón recojo el poco arroz con leche que quedaba, vuelvo a mi habitación y cubro su ardiente cuerpo serrano con el dulce postre, se lo voy extendiendo con mis manos por entre sus pechos, frotándolos con suavidad, llego hasta su ombligo y le cubro sus perfectos muslos, y riéndose me dice:
―Cómo te gusta esto de llenarme de algo bueno para comerme eh?
Yo entusiasmado por ver su precioso cuerpo lleno del postre y sin dejar de lamer con mi boca y saborear su tersa, fina y ardiente piel le respondo:
―Uf, dios mío, estas buenísima, te podría estar comiendo toda mi vida.
Después empiezo a pasar mi boca por todas las partes que tienen postre de abajo a arriba, parándome a deleitar su precioso y humeante conejo, sus duros y ...