1. Mi consuegro


    Fecha: 04/06/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... chicos se fueron a dormir y nos quedamos solos con Eduardo, nos sentamos en el sillón terminando de ver una peli, Eduardo me abraza, me besa y me acaricia las tetas, «no, que pueden salir los chicos», le dije evitando que me siga metiendo mano, «mañana cuando se vayan me paso a tú cama», me dijo volviendo a besarme. «Mejor me voy a dormir», le dije poniéndome en pie para irme a la cama, y Eduardo aprovechando la ocasión me pasa su mano por mi culo, apretando una de mis nalgas. Yo me fui sin decir nada, estaba nerviosa, ese hombre me gusta. Pasé una noche de sobresaltos, me despertaba a cada rato, me sentía intranquila. A la mañana escucho a los chicos cuando se estaban llendo, sentía como si mi estómago se cerraba, pero a la vez sentía como un cosquilleo entre las piernas. Pasaban los minutos y cada vez me sentía mas ansiosa, en el fondo deseaba que venga, hasta que después de unos interminables minutos,. siento que abren la puerta con mucho cuidado, mi corazón latía a mil, «estás despierta?», escucho que me dice en voz baja, yo me iba a hacer la dormida, pero sin saber porque le dije que si. Siento sus manos acariciar mi pie por sobre la sábana, subiendo, yo me hice a un lado, dándole lugar a mi lado. Eduardo se acostó besando mi boca y metiendo sus manos debajo de las sábanas, acariciando mi cuerpo, buscando mis tetas mientras no dejábamos de besarnos, levantando la camiseta que llevaba puesta y chupando mis pezones mientras yo levantaba mi cintura para que me quite las ...
    ... bragas, dejando que me acaricie la concha mientras yo buscaba con mi mano su polla. Sin dejar de besarnos nos desnudamos mutuamente, Eduardo me besaba toda hasta que me hace gritar cuando siento su boca en mi concha y su lengua en mi clítoris. Yo daba fuertes ayes de placer con mi consuegro chupando mi concha, metiendo sus dedos dentro y luego me los metía en el culo, haciendome que me retuerza de placer. Sentí como empezó a subir besando mi barriga, sentía el roce de su pija contra mis piernas, a medida que él subía basándome, yo lo esperaba de piernas abiertas gimiendo. Como acomoda su pija contra mi concha y grito de placer al sentir como la iba haciendo entrar. «Toda, metela toda», le pedía buscando su boca con la mía, hasta que siento como queda sobre mi, habiéndome metido toda la pija en la concha y me cogía suavemente, «hay mi amor, que rico me coges», le dije envolviendo mis piernas en su cuerpo, atenazandolo bien contra mí, disfrutandome como mi consuegro me estaba cogiendo. No nos decíamos nada, solo gemiamos, nos besabamos, Eduardo me chupaba las tetas sin dejar de hacer entrar y salir su pija de mi concha. Yo estaba tan mojada como jamás lo había estado, no recuerdo haber disfrutado tanto cogiendo como estaba disfrutando con Eduardo. Eduardo se pone de rodillas entre mis piernas, agarrando mis tobillos y las levantó más, sacando su pija de mi concha, la empezó a pasar contra mi ano, yo respire hondo, sabiendo por donde me la iba a meter, no era la primera vez que lo ...