Estaba obsesionado con Laura
Fecha: 15/05/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Johnpaulstarr, Fuente: CuentoRelatos
Estaba obsesionado, debo reconocerlo.
Laura estaba tan buena, tenía un cuerpo tan perfectamente voluptuoso y pleno, que de solo pensar en ella ya se me insinuaba una erección. Quería cogérmela a toda costa y de la forma que fuera; esa era la verdad. Pero ella parecía no darse cuenta de que yo la perseguía con la mirada y con todo lo que estuviera a mi alcance para intentar un acercamiento y así poder hablarle y llevarla al terreno de la conquista, que terminaría seguramente cuando nos encamáramos y gozáramos como dos animales.
Muchas veces la había imaginado desnuda metiéndose en mi cama y diciéndome muy suave al oído que deseaba ser mía, y que por favor la hiciera acabar una y otra vez como solo yo era capaz de hacerlo mientras comenzaba a tocarme suavemente la pija y la alistaba para, segundos después, meterla dentro de su boca y chuparla con tanta pasión que yo no era capaz de retener el orgasmo, y explotaba inundándola de semen. La sola idea de vaciarme dentro de ella hacía que me volviera loco, me sacaba de quicio.
Laura era una joven delgada y de carne firme como la roca; sus ojos color miel, su boca y su cuerpo terriblemente sensual que invitaba al placer hacían de ella un animal sexual perfecto. Todos los días, mientras viajaba a mi trabajo en el maldito transporte público que siempre venía repleto, pensaba en ella y la erección aparecía.
Una noche, ya de regreso a casa, estaba más lleno que de costumbre. Viajaba parado y para poder correrme un pequeño ...
... lugar tenía que hacer grandes esfuerzos y pedir disculpas por empujar a los demás pasajeros. Llegué casi hasta la mitad y ahí quedé, ya que se había terminado el espacio y era imposible seguir avanzando.
Fue así que justo delante de mí estaba parada una muchacha que intentaba mantener el equilibrio ante los sacudones del ómnibus; evidentemente le resultaba una tarea imposible, ya que el conductor parecía empecinarse en conducir mal y en convertir al vehículo en una coctelera donde todos nos movíamos a su ritmo.
No sé qué ocurrió; realmente no lo sé.
Pero el hecho es que sin poder evitarlo, comencé a frotarme contra su culo ante los reiterados vaivenes, y mi verga despertó, comenzando a agrandarse y a abultar dentro de mis pantalones. Quise hacerme a un lado y evitar que ella se diera cuenta, pero justo en ese momento el micro volvió a sacudirse terriblemente, y le apoyé de pleno el miembro; mi desesperación fue total.
Estuve tentado de disculparme, pero preferí esperar y ver si había notado el bulto: no dijo ni una palabra ni se dio vuelta para increparme.
“Menos mal”, pensé.
Nuevamente ocurrió el percance, y mi pija seguía aumentando de tamaño ante cada roce; la mujer continuaba como si nada. Decidí que intentar moverme era evidenciar la situación, por lo que decidí hacerme el distraído y continuar los frotes pasara lo que pasara; me quedaba la excusa de decirle que no tenía otra opción, dada la cantidad de gente que viajaba.
Repentinamente ella giró la ...