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CADA VEZ ES MEJOR... ME GUSTA PERO ME PREOCUPA
Fecha: 08/06/2018, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
La experiencia vivida en casa del Chupino me tranquilizó un poco sobre todo lo que me estaba tocando vivir en ese destino. Había comenzado lamentándome de la suerte que me tocó de ser desplazado en mis funciones y haber sido destinado a lugares tan alejados de la gran ciudad. Comencé a mirar con mayor atención cuanto ocurría a mi alrededor. Cada tanto llegaba al destacamento algún oficialito nuevo al que había que dejar que los hechos lo “domesticaran” en el uso y costumbres del lugar para luego seguir viviendo lo que nos tocaba en suerte. En total había en aquel puesto 7 funcionarios. El de mayor jerarquía era yo, luego dos oficiales de menor rango y cuatro subalternos, dos cabos y dos agentes. Todos venidos desde diferentes lugares, ninguno era nativo del lugar. El mas viejo de todos era un cabo que rondaba los 38, luego seguía yo con 34, el otro cabo y los agentes rondaban los 30 y los dos oficiales alrededor de los 25 años. Es decir todos hacedores potenciales de bebes y brindadores de placer sin medida. Me di cuenta que todas las nenas que ya habían probado el rigor de la verga en sus papitos o culitos eran asiduas visitantes del destacamento, sobre todo en horas de la siesta. Sucedía que a esa hora quedaban solos los policías mas jóvenes y atractivos que, ya con experiencias en el metier, no le negaban a ninguna la posibilidad de probar sus armamentos. Muchas veces me quedé oculto en algún lugar y los he visto mantener relaciones sexuales con las niñas visitantes. ...
... Recuerden que la primer experiencia la tuve con mi cuñadito a quien encontré prendido de mi verga brindándome una mamada sin igual una siesta estando solo en mi casa. Luego vino todo lo demás con penetración anal incluida. La segunda fue con Rosita y ocurrió de manera fortuita. Las sensaciones que se tienen al penetrar una vaginita tan pequeña pero con experiencias previas, es indescriptible. Sentir cómo les va entrando la chota ajustada y como succionándote hacia adentro es un placer sin parangón. En realidad el placer comienza cuando tocas los labios del papito con la cabeza de la verga y luego que, sin violentarlas, les das lo tuyo y ellas se entregan comiéndose todo llegas al sumun del placer. Después de las muchas noches con Rosi nunca más sentí lo mismo con mi esposa. Eran dos cosas diametralmente opuestas. Con Rosi descubrí que en ese pueblo nadie sabía ni hablaba de sexo oral, por eso sus dudas y temores cuando yo le pregunté si su papá le había hecho besar el pene y me dijo que no. La mía fue la primer pija que mamó y mis huevos los primeros que chupó. Con las hijitas del cabo Chupino llegué a lo máximo. Me hice habitué de aquella casa y ordenaba de tal manera las guardias que todos los días sábado me iba a comer a casa del cabo. Llegamos a compartir a los dos mayorcitas en la misma cama y ahí pude comprobar lo del por qué del apodo. De paso entendí por qué la mía entraba tan cómodamente en las niñas. El Chupino me entregó a la tercera de sus hijas para que la desvigue y ...